Hace 27 años, en Santo Domingo Tehuantepec, Oaxaca, no había ni teatro ni teatreros. Esto, para el ahora director escénico y dramaturgo Marco Pétriz, más que un impedimento, resultó un empujón.
«Ha costado trabajo», refiere en entrevista telefónica, desde Oaxaca, sobre los esfuerzos de la compañía que dirige, el Grupo Teatral Tehuantepec. «Tuvimos que formar tanto al público como a los actores».
Esencialmente nómada, pues la falta de teatro volvió itinerante al grupo en sus primeros años, la compañía oaxaqueña llega hoy al DF con la obra Otro día de fiesta, con dramaturgia de Luis Enrique Gutiérrez Ortiz Monasterio, LEGOM, sobre un texto de Pétriz.
La clave del grupo, sin embargo, reside en que nunca fue su fin último llegar a la capital, como lo es a veces para otras agrupaciones de teatro de provincia.
«Desde un principio (1987) hemos buscado hacer un tipo de teatro que llamamos teatro del entorno, aquél que tiene que ver con lo más cercano a nuestra cultura (de Tehuantepec); es un asunto idiosincrásico», cuenta.
El repertorio de la compañía confirma esta vocación con obras -a veces incómodas para la comunidad- como La casa de enfrente, sobre el incesto, Los instantes de luz, que aborda la violencia contra las mujeres, y Oscura ventana, sobre la celotipia (sentir celos).
«Aparte de ser artistas, creo que somos trabajadores sociales», juzga Pétriz. «Tenemos que tocar con el dedo estos temas».
Aunque ahora ya cuentan con una sede propia -que llaman Casa de Ensayo-, las primeras representaciones del grupo, todavía con obras de otros autores, se realizaban en las explanadas de Tehuantepec y de su casa de la cultura, pero también en habitaciones de viviendas intervenidas.
«Antes, los habitantes de Tehuantepec no querían las obras ni regaladas», recuerda el director sobre los montajes que, a lo largo de 27 años, se han vuelto eventos sociales imperdibles y de gran resonancia para el pueblo y sus comunidades cercanas.
Actualmente la compañía, fundada también Gabriela Martínez, su actriz de cabecera, y el escenógrafo Sergio Ruiz, tiene una base de cinco personas, con actores invitados de grupos de toda la República. Antes de fundarla, Pétriz ya había pertenecido a un colectivo que hacía teatro en comunidades de todo Oaxaca.
Otro día de fiesta, que se presenta de jueves a domingo hasta el 7 de diciembre en el Teatro Orientación del Centro Cultural del Bosque (CCB), trata sobre la amistad entre una mujer alcohólica y un muxe, uno de los tradicionales travestis homosexuales de Juchitán.
