Paulina RÍOS
OAXACA, (pagina3.mx).- Luego del anuncio del gobernador Gabino Cué respecto a que el decreto número 2, que aprobara en 1992 el entonces gobernador Heladio Ramírez López, sería revocado y con ello desaparecería el Instituto Estatal de Educación Pública (IEEPO), la Ciudad de Oaxaca se vio afectada por dos grupos: El del magisterio y de los cuerpos de seguridad.
Por un lado, patrullas y elementos de las Policías Estatal y Federal, así como de la Gendarmería hacían recorridos por la Ciudad, además de que otros grupos resguardaban los edificios del IEEPO, el magisterio oaxaqueño inició bloqueos en las vialidades de las calles del primer cuadro del Centro Histórico.
Además, entre la ciudadanía, a través de las redes sociales, corrió el rumor de que la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), adheridos a la combativa Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), tomarían las gasolineras, por lo que estos centros se vieron abarrotados.
Sin embargo, el magisterio nunca llegó este martes a las gasolinerías.