El Barcelona no pudo tener mejor samaritano en su calvario por defender el liderato de la Liga.
Los aficionados se levantaron de sus asientos, fastidiados por un partido plúmbeo, parsimonioso por el desinterés del Barcelona.
Ya no hubo más historia que la lesión de Bravo, sustituido por Ter Stegen, el portero que reclamaba la titularidad en la Liga para reforzar su vínculo con el Barcelona.
A la espera del 10, los barcelonistas no van, tampoco vuelven, paralizados por la clasificación cuando les sitúa como terceros provisionales de la Liga.
El gol de RakiticNo respondía, sin embargo, el entrenador y tampoco se activaba el tridente Messi, Suárez y Neymar.
Fuente: http://deportes.elpais.com/deportes/2016/04/30/actualidad/1462048650_670328.html