Diana MANZO / Corresponsal
UNIÓN HIDALGO, Oax., (#pagina3.mx).- El artista zapoteco Pedro Hernández y sus “Picasos”, como llama a las y los menores que asisten a su taller de arte “Picasso para niños”, impulsan la tradición de “La Rama”, que es un canto de coplas y rimas que anteriormente interpretaban infantes y adultos en época decembrina, pero que hoy vive una decadencia por la influencia de la tecnología.
La tradición de La Rama significa el anuncio de la llegada del Niño Dios y se realiza con una rama verde y fresca, una caja de cartón -donde guardan una imagen religiosa- y una vela, con los cuales se recorren calles y avenidas entonando cantos religiosos alusivos al mes decembrino y a cambio reciben monedas y dulces.
“Arriba del cielo cayó una cruz, el día 24 nació el niño Jesús”, este es un ejemplo de rima que entona La Rama cada que llega a una casa, y en este año se le han anexado rimas relacionadas con el terremoto del 7 de septiembre.
Según datos históricos proporcionados por José Arenas, la celebración de Las Ramas en Unión Hidalgo llegó en 1940, por parte de los hermanos Marín Lara quienes trajeron esta festividad del Puerto de Salina Cruz y comenzaron a salir a las calles con el comienzo de las posadas navideñas.
Para revivirla, el artista oriundo de Unión Hidalgo y las y los pequeños talentos decidieron impulsar la tradición de La Rama una semana antes de del 16 de diciembre, cuando inician las posadas, con la finalidad de contagiar a padres y madres de familia y motiven a sus hijos e hijas a cantar con La Rama.
Además de conservar la tradición, niños y niñas entre 5 y 11 años de edad utilizaron -con la ayuda del artista- materiales reciclables, como botes y latas, para convertirlos en instrumentos musicales.
Recorren las calles de la comunidad, cantan casa por casa diversas coplas y rimas con temas navideños y del terremoto que dejó el 70 por ciento de afectaciones en Unión Hidalgo.
Jacciel Morales y Carlos Mario Osorio, ambos de 11 años de edad, son las voces principales, acompañados de las dulces voces de María, Betsabé, Marythé y otros menores para pasear a La Rama.
Recorrer las calles con La Rama y los instrumentos musicales motiva a la ciudadanía para que también lo haga y que siga viva la tradición que llegó en la década de los cuarenta y que ha sido adoptada por esta cultura indígena.
Pedro no busca acabar con la tecnología, su propuesta es que infantes y adultos revivan tradición, considerada una de las más bellas de la época decembrina, que empezó a decaer a partir del año 2000.
“Lo que deseamos es que más niños y sus padres salgan a la calle y canten con su rama, es mi mayor deseo, por eso motivé a mis Picassos para que inventaran rimas sobre el terremoto y también decembrinas, ha sido una grata experiencia que seguiremos impulsando para que las tradiciones no mueran”.
“Picasso para niños” es un proyecto basado en las artes y la educación no formal, creado desde hace nueve años por el artista plástico autodidacta Pedro Hernández, cuyo su aprendizaje lo ha basado en libros, revistas y películas.
Las y los niños han aprendido a elaborar pinturas al óleo, cerámica, figuras de plastilina y jabón, y además conocen de fotografía, literatura, teatro y ahora música.