Jaime GUERRERO
Oaxaca.- De cara a la renovación de la dirigencia del Partido de la Revolución Democrática (PRD), diputado local del Sol Azteca, Anselmo Ortiz García, anticipó que ese instituto político requiere de un dirigente con espolones porque en el 2016, enfrentar a un PRI que quiere regresar al gobierno en dos años, por medio de la figura del ex gobernador, José Murat Casab.
A escasos 10 días de la renovación de la dirigencia perredista en Oaxaca, señaló que PRD ya no se puede equivocar y tomar decisiones tardías.
En medio de los preparativos y la búsqueda de acuerdos entre las principales tribus, éstas se alistan para integrar la Mesa Directiva del Consejo Estatal, el Comité Ejecutivo, que incluye el nombramiento de la nueva dirigencia.
Aclaró que la realidad política del PRD establece un modelo electoral indirecto, el cual establece que quien tenga mayor cantidad de consejeros estatales de lista y que por derecho estatutario entran, es el que va dirigir al partido y podrá conducirlo al proceso 2016.
“Ningún grupo por si solo tiene el porcentaje electoral suficiente para pensar que puede presidir la presidencia del PRD en Oaxaca”, asentó Ortiz García.
Anticipó que quien busque la dirigencia, requiere de mucha política e integrar un abanico de expresiones políticas que sumen el porcentaje necesario para construir la presidencia y secretaria general.
“El próximo presidente debe de emanar entre la mayoría de los grupos del PRD. No de todos. Esa es la regla democrática. No necesitamos a todos o no nos necesitan todos”, se sinceró y sentenció.
Ortiz García, recomendó a los aspirantes, no empezar mal la negociación, porque dijo que no existe ningún acuerdo factico para elegir la nueva dirigencia del PRD en Oaxaca. “Lo que hay es una realidad y los números que produjo la elección interna del pasado mes de septiembre, en la cual nadie obtuvo más del 60 por ciento por sí solo”.
Consideró entonces que el perfil del próximo presidente del PRD “tiene que ser un hombre que conozca al partido, los espolones suficientes para enfrentar una elección inédita en el 2016”.
“Tiene que tener una capacidad enorme de aglutinar, consensar y sumar en su entorno a la mayoría de las expresiones políticas, ser un demócrata en el sentido de debe de aceptar que se requiere de una mayoría para gobernabilidad partidaria. Debe de tener una imagen social aceptable”, esbozó.
El legislador local, dijo que el PRD no puede seguir teniendo dirigentes que “chiquitos frente a la vida y el mundo”. “Que coopere con el gobernador, que sea institucional”, manifestó.
Señaló que Jesús Romero López; el diputado federal, Carol Antonio Altamirano y el alcalde de Valle Nacional, Felipe Reyes, son tres candidatos más visibles y que han manifestado su aspiración.
Y aun cuando indicó que es importante que sea una mujer quien encabece la nueva dirigencia, declaró que no se ve una sola con la capacidad, talento intelectual y político para dirigir al PRD y sus tribus complejas.
“Ante la complejidad de lo que se va enfrentar en el 2016, tiene que ser un dirigente con espolones porque vamos a enfrentar a un PRI que quiere regresar con (José)) Murat y eso implica un cabrón que tenga que huevos”, lanzó.
Puntualizó que el PRD necesita otro rostro parta una época que ya no es la de ayer. Ya en la antesala del proceso electoral gubernamental, dijo que se requiere de un partido más urbano, que no se cargue al tomar decisiones políticas, frente a la corrupción, las complicidades de la política y el crimen.
“El PRD ya no se puede equivocar y tomar decisiones tardías. Se necesita un dirigente que tenga capacidad de reaccionar frente a las crisis, necesitamos un general. Necesitamos un dirigente que nos permita ir a dormirnos sabiendo que él se hace cargo del barco”, concluyó.