*Jorge Oropeza
OAXACA, (pagina3.mx).- Este 24 de octubre, a solicitud del Gobierno del Estado, se reunieron varios representantes de organizaciones de la sociedad civil y actores vinculados a las mismas, con el objetivo de integrar el Consejo Consultivo Ciudadano de la Corporación Oaxaqueña de Radio y Televisión (CORTV). En la Asociación Mexicana del Derecho a la Información (Amedi) Capítulo Oaxaca decidimos aceptar la invitación para ser parte de éste. Ahora nos tocará liderar, desde una visión crítica y académica, el contrapeso del que sigue siendo un medio público estatal al servicio del Gobierno. Las experiencias de más de una década en México y de casi un lustro en la entidad trabajando el tema nos dan el soporte y la probidad para ello.
La llamada ‘‘integración’’ de este consejo de cimientos ciudadanos, y con calidad de observador permanente, se dio de forma abrupta. En Amedi deseamos que lo anterior obedezca a la imperiosa necesidad de que así fuera y no al reloj político que tiene sus manecillas marcando el informe del 15 de noviembre y la próxima apertura de las nuevas instalaciones del canal y radiodifusora que se dará en un mes.
El Consejo Directivo de la Amedi Capítulo Oaxaca, así como veintinueve organizaciones y personalidades más, le han dado el voto de confianza a la Corporación Oaxaqueña de Radio y Televisión y al Gobierno de Oaxaca. Sin embargo, no por ello dejamos de observar y de pasar por alto las dudas que generan las prisas, ya que sólo hubo una reunión previa de carácter informativo antes del llamado definitivo; las formas, pues crear una figura de este tipo sin un marco legal que lo soporte es una moneda al aire donde la buena fe es la única cara existente; y los antecedentes, porque conocemos la historia de los consejos consultivos en Oaxaca donde no podemos negar la disposición gubernamental a tenerlos, pero tampoco la ineficiencia y debilidad que alcanzan al ser, casi siempre, integrados por decenas de personas, sin efectos vinculatorios y como parte de una estrategia cosmética del talante democrático necesario para una muy coyuntural estrategia política.
En este sentido, es muy importante decir que para que se instale formalmente el consejo consultivo es imprescindible contar con un adecuado marco normativo, no sólo observando las recientes reformas en materia de radiodifusión, sino adecuándolas conforme a las exigencias democráticas y sociales de nuestra entidad. De lo contrario no existe tal.
En cualquier escenario revestido de formalidad y evidente apertura, antes de crear un Consejo Consultivo Ciudadano, de convocar a la creación de una Defensoría de Audiencias o de anunciar y arrancar con una nueva e “incluyente” barra programática debe haber un código de ética que delinee, normas internas claras que señalen la ruta y sobretodo una ley que lo sustente. Y éste no es el caso.
En Oaxaca los legisladores no vislumbran el tema y posiblemente ni siquiera lo conozcan con la profundidad requerida para armonizar al ritmo de estas acciones, antes de que finalice el 2014, el marco jurídico estatal de la Corporación Oaxaqueña de Radio y Televisión con las pautas marcadas en la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión.
Quizás la principal deficiencia de un consejo consultivo sea la falta de autonomía e independencia editorial del medio público que vigila. Y es que, mientras la CORTV no deje de ser un apéndice del Poder Ejecutivo y el órgano ciudadano vigilante no tenga injerencia real y pragmática en los criterios y los contenidos se sigue estando en un escenario de buena voluntad.
Por otro lado, es conveniente apuntar la necesidad de contar con una agenda de trabajo para guiar la transición mediática de la CORTV. Este documento debe convertirse no sólo en un instrumento de acciones y toma de decisiones, sino también en una herramienta que permita a la ciudadanía verificar los avances y objetivos alcanzados.
Un Consejo Consultivo Ciudadano en la CORTV con los mínimos efectos vinculantes legitimaría los esfuerzos de una administración estatal con apertura y visión democrática. Incluso darle la calidad de órgano autónomo al medio público estatal, o al menos las capacidades técnicas y financieras propias, cerraría el círculo que, en el discurso, ha enaltecido el Gobierno de Gabino Cué.
*Coordinador de Vinculación de la Asociación Mexicana del Derecho a la Información Capítulo Oaxaca
