Pedro MATÍAS
OAXACA, (pagina3.mx).- Con el acompañamiento del albergue “Hermanos en el Camino”, migrantes tomaron la Fiscalía Atención al Migrante con sede en Ciudad Ixtepec para exigir la renuncia de la fiscal Yadira Castillo por su insensibilidad ante el incremento de delitos contra indocumentados como el secuestro del menor hondureño Jerson Omar Morales.
Por su parte, la Procuraduría General de Justicia del Estado afirmó que desde el momento de la denuncia se activó el protocolo de búsqueda y localización del menor hondureño presuntamente desaparecido en Tapanatepec, razón por la que se han realizado recorridos a pie y se ha contratado perifoneo.
Según la denuncia de no localización del menor Jerson Omar Morales, de 10 años de edad y originario de Honduras, ocurrió el pasado 16 de noviembre en inmediaciones de la población de “Los corazones”, Agencia de San Pedro Tapanatepec.
Refirieron que este domingo 23, un comando de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI) en coordinación con la fiscal Yadira Castillo y del migrante Mario Augusto Chávez, quien se presentó como tío del menor desaparecido, se trasladaron a la población de Chahuites para continuar el operativo de búsqueda.
Con el apoyo de la Policía Estatal, Federal e incluso del Director de Seguridad Pública de Tapanatepec se implementó un operativo que se dividió en dos grupo que inspeccionaron el tramo “Chahuites” y la zona de “Los Corazones”.
Sin embargo, el responsable del Albergue Hermanos en el Camino, Alberto Donis Rodríguez, declaró que desde el pasado fin de semana los migrantes decidieron tomar pacíficamente las oficinas de la Fiscalía de Atención al Migrante porque únicamente se ha convertido en receptora de denuncias
Su postura la soporta en que “el Albergue ha documentado más de 150 denuncias penales únicamente del mes de agosto a la fecha que se han interpuesto en la Fiscalía de Atención al Migrante” por los delitos de robo, robo con violencia, violación sexual, asalto a mano armada, privación ilegal de la libertad y extorsión de agentes del Instituto Nacional de Migración, corporaciones de la Policía Federal y Estatal y crimen organizado.
Mencionó que el índice de delitos se ha disparado desde el mes de agosto cuando la Secretaría de Gobernación puso en marcha el “Programa Frontera Sur” y que en la práctica se ha traducido a la realización de operativos violentos en contra de la población Migrante que transitan por México para llegar a Estados Unidos.
Y es que, dijo, “en la carretera se han reforzado los Controles Migratorios y en las Estaciones del ferrocarril han impedido que las y los migrantes se suban y viajen en la “Bestia” para evitar, según el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, que sufran accidentes y sean presas del crimen organizado”.
Sin embargo, este programa ha obligado a la población migrante a tomar rutas alternas y más peligrosas, es decir, para llegar hasta Ixtepec se ven obligados a caminar varios días por la vía del ferrocarril, exponiéndose a altas temperaturas y a la delincuencia que opera en la zona.
De ahí que en varias zonas de Oaxaca que comprende Corazones, Chahuites, Zanatepec, Reforma de Pineda, Tapanatepec, Las Palmas, Unión Hidalgo, Juchitán e Ixtepec, se hayan incrementado los delitos contra migrantes.
Donis Rodríguez considera que las agresiones han aumentado en un 90% y la Fiscalía de Migrantes no ha estado a la altura de las circunstancias, por tal motivo decidieron tomar de forma pacífica las instalaciones de la oficina de la Procuraduría y “no la desalojaremos hasta que aparezca con vida el menor Jerson Omar Morales de la comunidad Garífuna de Honduras, quien fue privado de su libertad.
También pidieron que de las más de 150 denuncias penales (legajos de investigación) que la Fiscalía ha iniciado en estos últimos 4 meses se requiere que se practiquen las diligencias necesarias para que los delitos no queden impunes.
Además, piden que la Fiscalía Especializada de Atención al Migrante sea realmente una Agencia investigadora y no una oficina receptora de denuncias, de ahí que pidieron la remoción de la fiscal Yadira Castillo, por haber descuidado su responsabilidad, ser omisa ante el incremento de delitos y violencia en la zona, así como por su poca sensibilidad con las víctimas.
