Pedro MATÍAS/Enviado | I de III partes
SAN FRANCISCO IXHUATÁN, Oax., (pagina3.mx).- Surcar el mar del Golfo de Tehuantepec como lo hacen las y los migrantes en busca de un sueño, pareciera una aventura, pero en realidad es la encarnación del espanto, tan parecido a la muerte.
Y es que la ruta marítima muchas veces no llega a buen puerto. Al contrario, el embravecido mar se ha convertido en un cementerio donde no hay cuerpos, ni rezos ni tumbas donde llorar.“Si por tierra se pierde el rastro de los migrantes, por mar ni esperanzas de llevar un registro, es algo muy triste”, refiere el padre Alejandro Solalinde Guerra, sobre todo porque “esta ruta marítima es tan peligrosa como silenciosa donde no deja de fluir el tráfico de personas, de droga, de armas y hasta de órganos”.
Aquí es como si los motores de las embarcaciones donde se trafica con humanos carecieran de sonido o como si las fauces de la bestia marina no dejaran huella porque las autoridades de la Armada de México ignoran lo que es un secreto a voces.
Lo que es más, dijo el sacerdote católico, “mi hipótesis es que hay un punto de corrupción –entre la Red Internacional de migrantes que opera desde Sudamérica, pasa por Centroamérica y llega a Estados Unidos pasando por México-, porque es imposible que la Marina, con el equipo tan sofisticado que tiene, no vea nada”.
Al preguntarle al fundador del albergue Hermanos en el Camino sobre la ruta marítima, lanzó un hondo suspiro que, curiosamente, parecía de indignación porque:
[pull_quote_center]“México, desde 1992, terminó su vocación de líder, de hermano mayor, y viene de peor en peor hasta llegar a ser el hermano insensible que ha dado la espalda a sus hermanos migrantes”.[/pull_quote_center]
Esto, pese a que la emergencia humanitaria se ha convertido en pandemia en Centroamérica donde unas 400 mil personas huyen de sus hogares cada año con el deseo de salvar sus vidas, y México se convierte para ellos en un verdadero infierno al ser víctimas de discriminación, criminalización, asaltos, extorsiones, asesinatos y violaciones.
Los pescadores que tienen sus chozas asentadas en las orillas del mar muerto relatan cómo al agonizar la luz del día y conforme avanzan las horas, el silencio del mar es roto con el sonido de los motores de las lanchas que llevan a migrantes como mercancías.
Poco a poco empiezan a contar historias tétricas del naufragio de lanchas repletas de migrantes, algunos de ellos vomitados por el mar, otros que son tragados sin dejar rastro, o de la localización de polleros muertos que estaban “forrados” de billetes.
Apenas en abril pasado, en la Isla de León fue localizado el cuerpo de una mujer -al parecer centroamericana- que se encontraba ya en estado de descomposición. ¿Cómo fue a dar ahí? Es fácil de deducir: O naufragó la lancha en que viajaba o la tiraron los polleros para aligerar el peso de la embarcación, cuenta el presidente municipal de Ixhuatán, José Luis Henestroza.
En diciembre del año pasado el mar también vomitó una lancha de doble motor. “Mínimo era tripulada por dos personas. Tal vez venía cargada de migrantes, pero ninguno apareció. No creo que estuviera vacía”, agregó.
Aquí, en este municipio, precisamente el 16 de octubre de 2007, naufragó una lancha que dejó 14 muertos, tres sobrevivientes y ocho desaparecidos. Estos se los tragó el mar.
[pull_quote_center]“Es un secreto a voces que existe esta ruta de migrantes pero nadie la ve. Hace unos años naufragaron varias lanchas. Una lancha que traía 25 pasajeros y fallecieron 22 frente a la playa Aguachil, ya en las costas de Oaxaca”, recuerda el edil.[/pull_quote_center]
Los traficantes de humanos utilizan lanchas con doble motor de borda. Son motores muy potentes y como van navegando por el mar vivo, el mar abierto, el peligro es latente. Recordó que en la playa Aguachil fueron localizados unos cuerpos semienterrados entre las dunas de arena. Otros cuerpos totalmente despojados de sus ropas fueron encontrados entre los bejucos, ramas y troncos expulsados por el mar. Otros más con los párpados inflamados y con señales de putrefacción.
En esa ocasión, unos 40 marinos fueron “sembrados” en una franja de 35 kilómetros para rastrear la zona que pasa de Isla de León al Cerro de la Tortuga, Cachimbo, Aguachil y Pueblo Viejo.
Los cuerpos fueron envueltos en bolsas negras y cargados en unas camillas improvisadas con ramas atadas con mecates y terminaron en una fosa común.
[quote_box_left]Hizo hincapié que esa ruta no solo es utilizada para pasar migrantes sino para el tráfico de droga, como sucedió el 16 de julio de 2008 cuando la Armada de México interceptó a un narco submarino de 10 metros de largo navegando rumbo al Norte, a unos 200 kilómetros al sur del Puerto de Salina Cruz, Oaxaca.[/quote_box_left]
Aunque la Marina pretendió tomarse el éxito de este decomiso, las agencias de Estados Unidos la desmintieron al aclarar que su equipo detectó y aviso a las autoridades mexicanas, las cuales lograron el arresto de la tripulación del semi-sumergible que transportaba cerca de 6 toneladas de cocaína.
Ante el endurecimiento de las políticas migratorias y para evadir las garitas del Instituto Nacional de Migración (INM) se han diversificado las rutas. La ferroviaria es la más conocida por el paso de La Bestia, como se le conoce al tren de Ferrocarriles del Sur, el cual sale de Arriaga, Chiapas, pasa por Reforma de Pineda, Chahuites, Ixtepec, Matías Romero, comunidades de Oaxaca, y llega a Veracruz.
La segunda ruta es la carretera; sin embargo, se encuentran garitas en el estado de Chiapas, así como en Tapanatepec y La Ventosa, ya en territorio de Oaxaca; la tercera ruta es irse por Tapanatepec, pasar por Rincón Juárez y llegar a la Isla de León, donde utilizan lanchas para llegar a Salina Cruz.
La ruta del Pacífico es la más peligrosa porque viene arqueando desde Sudamérica a Centroamérica con escala en Guatemala y luego pasan a Puerto Arista en Chiapas, y continúan la ruta por los pueblos mareños de San Francisco y San Dionisio del Mar hasta llegar a Salina Cruz o Huatulco.
El edil emanado de la alianza PAN-PRD informó que tiene incluido en su Plan de Desarrollo Municipal construir una casa albergue, porque Ixhuatán “ya se volvió el paso de los cachucos”.
[pull_quote_left]“Aquí viven hondureños, guatemaltecos y salvadoreños. Es normal ver a indocumentados. Nada más que no hagan desmanes ni anden llevándose lo ajeno, porque eso generaría una molestia y el mismo pueblo los expulsaría”, mencionó.[/pull_quote_left]
Con apenas 10 meses en el cargo de la Presidencia Municipal, José Luis Henestroza también comenta que a la Isla de Cachimbo han llegado comandos armados para saquear la comunidad. Particularmente estos asaltos de los piratas del siglo XXI los cometen en el mes de diciembre, una o dos ocasiones. Lo que habla de la presencia de gente extraña, mafiosa.
Por esta razón, a partir del 12 de mayo, elementos del Ejército Mexicano y la Marina apoyados por la Policía Estatal realizan un operativo conjunto ante el incremento de la inseguridad por la presencia de los zetas y sobre todo por las extorsiones que realizan.
El también exdirigente magisterial reconoce que el operativo es por tiempo indefinido y abarca los municipios de Zanatepec, Reforma de Pineda, San Francisco del Mar y San Francisco Ixhuatán porque hay preocupación porque los extorsionadores dicen ser de los zetas y piden 500 o mil pesos y la gente acepta y dan saldos de 500 pesos.
