Everardo R. Bohórquez y Cuevas, corresponsal
La Diva –quizá la única- del humorismo sano y familiar de México, María Elena Velasco Fragoso, la India María, falleció la madrugada de este viernes 1 de mayo, luego de que no pudo superar el cáncer intestinal que padecía desde hace ya varios años y del que fue operada para extraerle un tumor, en febrero último, hace ya varias semanas.
Esta gran actriz, comediante, bailarina, tiple del Teatro Blanquita, además de directora y productora de cine, guionista de varias de sus propias películas, así como actriz de televisión y teatro, encarnó a uno de los más queridos personajes de la farándula: la mexicanísima India María, mediante lo cual obtuvo éxito, fama y dinero.
Velasco Fragoso nació el 14 de diciembre de 1940, en la ciudad de Puebla y se inició como integrante del ballet de cuadro del famoso Teatro Blanquita—antes Teatro Margo—localizado en el Centro Histórico de la Ciudad de México, en donde ascendió de simple bailarina a “patiño” favorito de los grandes cómicos que refrendaron sus triunfos ahí, Fernando Soto “Mantequilla”, Joaquín García “Borolas, Adalberto Martínez “Resortes”, Omar Jasso, entre otros, en sketchs que alcanzaron gran fama entre los asistentes al espectáculo.
Ahí conoció al coreógrafo y director de escena del Blanquita, el también actor de origen ruso, Julien de Meriche, con quien casó y de cuya unión nacieron los tres hijos de la pareja: Iván, Julliete y Boretti, mismos que no adoptaron la profesión de sus padres.
Luego de su paso por el teatro de revista, María Elena ingresó al cine mexicano en varias películas, pero al paso del tiempo interpretó sus propios filmes, iniciándose con El Bastardo su primera cinta, las más de veinte que interpretó como protagonista principal, entre las que destacan Tonta, tonta, pero no tanto, El Coyote Emplumado, así como una de las que más se le recuerdan: Las Delicias del Poder, donde interpreta a la sustituta de una hipotética candidata presidencial. Su director de cabecera fue el gran actor Fernando “El Papi” Cortés.
En uno de los diálogos de este último filme que sostiene con otro gran actor: Ernesto Gómez Cruz, quien se encarga de preparar a una candidata presidencial sustituta, y la India es por añadidura analfabeta, a la que instruyen como abogada, culta y experta política.
Gómez Cruz dice: .-¿Te acuerdas de que es el Poder Ejecutivo?, María Elena responde: Sí, es el que ejecuta; .- ¿Cuál es el Poder Legislativo? ,-El que legisla. – Muy bien y ¿cuál es el Poder Judicial? .-El que te jode, responde el personaje dela cinta.
Actuó también en varias de sus películas con actores consagrados y famosos, como el gran Fernando Soler, quien la acompañó fílmicamente al menos en dos ocasiones. Asimismo compartió el plató cinematográfico con el actor, cantante y gran cómico Lalo González, “Piporro”.
También hizo teatro y encabezó su propia serie de televisión: Ay María, qué puntería. Antes de esto último, María Elena se hizo famosa por su participación en los programas Sábados Gigantes y Siempre en Domingo, dirigidos por el periodista y conductor Raúl Velasco, quien actuaba como “El Güerito”, en diálogos humorísticos con la India María, la que supuestamente perseguía enamorada de Velasco, en segmentos del programa dominical de larga duración.
Así, Velasco Fragoso encarnaba al personaje de La India María, una presunta indígena mexiquense de la etnia Mazahua, aunque siempre ésta se metía en líos. Con ese personaje la hoy desaparecida se mantuvo ya identificada, al igual que Mario Moreno Reyes “Cantinflas”, quien siempre fue el mismo peladito de barriada, aunque se vistiera con ropajes de padrecito, barrendero, policía, etcétera.
Es de justicia apuntar que con ese popular personaje, la actriz ganó muchos adeptos por su mexicanidad y que la propia intérprete aseguró que al conocer cada vez más a México, aprendió a amarlo más.
María Elena Velasco, la India María, representa un modelo de superación como mujer y como artista, ya que empezó desde las llamadas “infanterías” o integrantes del coro de teatro, hasta alcanzar con su personaje, la altura de directora cinematográfica, habiendo sido estrella, actriz, guionista y productora. Encarnando a su personaje más conocido, filmó su último largometraje: La Hija de Moctezuma, sin que con ello alcanzara éxito como en otros tiempos, en los que se esperaban con suma expectación, sus películas.
Los restos de la única –o quizá la última—Diva del Humor Familiar, fueron velados en una agencia mortuoria de la Colonia del Valle, aunque se ignoran detalles de su funeral y el destino de sus restos, igualmente por la reserva de sus familiares, paralela a la actitud discrecional respecto de su vida privada, con la que siempre se manejó María Elena Velasco viuda de Meriche.
El público mexicano -lo mismo que el de habla española habitante en el país del norte vecino a nuestro México-, la recordarán con cariño, gratitud y por su sentido del humor y mexicanidad, mostrados en todas sus películas, deseando, asimismo, que ella descanse en paz.
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