Pedro MATÍAS / Jaime GUERRERO
OAXACA, Oax. (
pagina3.mx).- El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) no autorizó el proyecto del Centro Cultural y de Convenciones de Oaxaca (CCCO) porque las estructuras arquitectónicas propuestas representan una afectación severa al paisaje cultural e histórico de la ciudad.
Sin embargo, el gobierno de Gabino Cué desoyó la recomendación del INAH de que el Centro Cultural no se ubique en el Cerro del Fortín y sigue empecinado en favorecer a su secretario de Turismo, José Zorrilla, quien ya reconoció tener conflicto de intereses al ser accionista del hotel Victoria.
Por su parte, antropólogos, historiadores, arqueólogos y científicos sociales del INAH agrupados en la delegación sindical DII-1A-I se solidarizaron con el maestro Francisco Toledo al apoyar de manera irrestricta las medidas y acciones emprendidas por el Frente de Defensa del Cerro del Fortín tendientes a lograr la suspensión definitiva del Centro de Convenciones en esa reserva natural.
En la carta enviada al pintor Francisco Toledo y firmada por la secretaria general María de la Luz Aguilar Rojas y Daniel Nahmad, reconocen que durante los últimos 30 años la oligarquía tanto nacional como internacional con el apoyo de la clase política han emprendido una serie de afectaciones a los bienes culturales y naturales de México orientadas a lucrar económicamente con eso patrimonios.
Y en ese marco se sitúa la lucha que la sociedad civil ha emprendido en la capital de Oaxaca en contra de las obras del Centro de Convenciones localizada en el enclave natural de vital importancia para el equilibrio ecológico de Oaxaca: El cerro del Fortín.
Por su parte, el INAH emitió un comunicado donde menciona que el proyecto enviado por la Secretaría de Turismo del Estado de Oaxaca fue evaluado por el Instituto y éste emitió una recomendación al Gobierno del Estado de Oaxaca para que el mismo no se ubique en el Cerro del Fortín.
Sin embargo, agregó, las obras no han sido suspendidas debido a que en este caso el INAH carece de competencia legal para emitir o negar una autorización, toda vez que los sondeos practicados en el terreno permitieron descartar la presencia de vestigios arqueológicos.
Aunado a ello, la construcción se ubica fuera de los perímetros de protección de las declaratorias federales de la Zona de Monumentos Históricos del Centro Histórico de la Ciudad de Oaxaca y del correspondiente a la Zona Arqueológica de Monte Albán.
Considera que ese espacio debe protegerse porque se trata de un riquísimo patrimonio de los oaxaqueños y de la nación mexicana que ha sido inscrito por la UNESCO en la lista del Patrimonio Mundial.
.