Por lo visto, Ridley Scott ha perdido todo su filo de antaño para convertirse, horror, en un émulo de Ron Howard.
Y qué elemental resulta en comparación The Martian.
Ese fue el caso de The Martian –en México se va a titular Misión rescate y se estrenará en un par de semanas–, proyectada en el TIFF en una de sus funciones de gala.
Si bien Scott había aportado dos obras capitales a la ciencia ficción –Alien (1979) y Blade Runner (1982), claro– su tardío regreso al género es otro boleto.
De hecho, hay una película de mediados de los años 60 llamada Robinson Crusoe en Marte (debida a Byron Haskin).
Fuente: http://www.jornada.unam.mx/2015/09/13/opinion/a10a1esp