En México muchas OSC tenemos claro que no estamos para suplir las tareas que son responsabilidades de Estado, pero sí para exigir que recupere su papel de regulador y garante de los derechos humanos.
El crecimiento de las organizaciones de la sociedad civil (OSC) ha sido respuesta al adelgazamiento del Estado y al decaimiento del papel benefactor que asumieron en el siglo pasado algunos países, en especial los que cuentan con economías fuertes.
Entre los cambios resalta uno que, más que absurdo, yo diría que es grotesco y ridículo si no fuera por la gravedad implicada.
La rendición de cuentas y la exigencia al Estado para apegarse al estado de derecho se ha convertido en el centro de nuestro trabajo cotidiano.
Se trata de una nueva norma que tiene como propósito establecer los lineamientos técnicos para llevar a cabo una atención integral a la salud de las y los adolescentes (10 a 19 años de edad).
Fuente: http://www.jornada.unam.mx/2015/09/18/opinion/022a2pol