A mí más me interesa saber cómo lo sienten tú y mi gente de allá.
Me vendrá muy bien contarte, para así ordenar también mis sensaciones nada duchas en esta materia, bien lo sabes.
Déjame, Gustavo, saber de ti, tu familia y de cómo ves lo que acontece en Catalunya.
No quiero aburrirte con los bostezos que aquí llaman argumentos y son sólo juegos malabares y partidistas con las cifras de ayer.
Para no errar, y mucho menos ser indiferente, se hace importante la ayuda de un amigo.
Fuente: http://www.jornada.unam.mx/2015/09/30/opinion/019a1pol