Las mujeres teólogas no piden que el Papa o los obispos hablen de las mujeres o den poder a las mujeres.
El sacerdocio de las mujeres es, ciertamente, un “caso cerrado”, pero en la dirección opuesta a la que supone el actual Pontífice.
Según las estadísticas que Francisco ha conocido estos días, el 63% de los católicos estadounidenses son favorables a la ordenación de mujeres.
Con las mujeres puede pasar lo mismo: se van yendo sin que los obispos se enteren.
Pero quiero decirles algo: la Virgen María era más importante que los apóstoles y que los obispos y que los diáconos y los sacerdotes.
Fuente: http://elpais.com/internacional/2015/09/29/actualidad/1443514219_915648.html