En la época del expresidente, la participación era del 15%, frente al 65% de las primeras elecciones tras su caída.
La vieja guardia de la era Mubarak está a punto de regresar a la primera línea política.
Liderados por los Hermanos Musulmanes —el régimen de Al Sisi los considera “una organización terrorista”—, acapararon el 70% de los votos.
“El régimen ha diseñado unas reglas del juego para tener un Parlamento fragmentado, y lo conseguirá”, espeta Gohar.
Egipto celebra a partir de este domingo elecciones legislativas con el telón de fondo de una ley electoral que favorece a los miembros del partido del expresidente.
Fuente: http://elpais.com/internacional/2015/10/16/actualidad/1445022410_847033.html