Fue ahí cuando demandó una «reafirmación clara del orden constitucional» y cuando enfatizó varias veces que no es nada partidario de reformar ahora la Constitución.
Esa primacía preocupa y molesta a Aznar, que señaló que es un serio aviso para el PP de cara a las generales.
Aznar pidió de nuevo una profunda reflexión sobre ese hecho en el PP, que es el partido de Gobierno en España.
Aznar mantiene que esos reproches que formuló recientemente son un «diagnóstico» de «hechos y datos» que, además, no han sido refutados por nadie.
Por si quedaba alguna duda, y ante de entrar en temas sobre Venezuela y Cuba, Aznar concluyó: «La Constitución no es el problema de España».
Fuente: http://elpais.com/politica/2015/10/05/actualidad/1444037292_808370.html