Sonia Vásquez
OAXACA (pagina3.mx).- El arzobispo José Luis Chávez Botello pidió a la población oaxaqueña a no vaciar la Navidad pues sin la vivencia de sus valores estas bellas costumbres pueden reducirse a folklore, a costumbre sin vida o pieza de museo.
Explicó que es importante recordar que lo que dio origen y sustenta la Navidad es El Niño de Belén, el hijo de Dios que se hizo hombre para salvar al mundo del mal, ofrecer la paz desde el corazón, mostrando el camino del amor y de la alegría, de una vida auténtica.
Dijo que Oaxaca tiene tradiciones de gran riqueza cultural y religiosa, pero es urgente fortalecer su raíz y sentido original, con la vivencia y transmisión de valores, abrirse a los demás, compartir celebrar y alegrarse juntos.
Manifestó que no vale la pena continuar atados divisiones, a enemistades y el rencor; siempre se pierde mucho más de lo que se quiere ganar, más cuando se contagia con ese veneno a niños, niñas y adolescentes.
La Navidad, dijo, nos descubre y alimenta el hambre de amor y de unidad que todos tenemos, es un tiempo privilegiado para rehacer la vida, para fortalecer la unidad y el amor de la familia, para acercarnos más y fortalecer las relaciones en barrios y comunidades. «No nos neguemos la posibilidad real de convivir en paz y de ser felices».