DestacadasDe rezador, un oficio que languidece

De rezador, un oficio que languidece

-

Por: Itzel D. Audelo, Diego O. Avendaño V., Abril S. Flores y José L. Ríos*

Oaxaca, Oax., (#página3.mx).- Con la naturaleza que le dan 80 años dedicados a rogar, orar, implorar y suplicar por la humanidad y sus necesidades, Don Adrián Barrita Santos, originario de Ejutla de Crespo y convertido en el rezador más veterano en su comunidad ubicada a 60 kilómetros al sur de la capital, advierte que estos rezos y sus practicantes padecen una crisis que está llevando esta noble práctica a la extinción.

A sus 87 años de edad, Don Adrián, quien forma parte de la comunidad católica ?a la cual, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), pertenecen seis de cada 10 habitantes del estado de Oaxaca?, es uno de los rezadores con más experiencia en los alrededores de la capital oaxaqueña y, a su vez, un fiel testigo de lo que esta práctica le ha traído consigo.

Su tez morena muestra las señas del trabajo de campo al que se ha dedicado; la mirada profunda de esos ojos cafés guarda las lecciones de su padre ?“de tal palo tal astilla”?, que le incitaban a convertirse en un siervo de Dios a muy temprana edad.

El Ronco”, como es conocido en su pueblo natal, posee una complexión delgada que resalta en su andar por las tierras en las que cosecha ejotes en abundancia cada Cuaresma. A través de sus graves cuerdas vocales se conspiran los cantos y los rezos para que un alma encuentre el camino a Dios con ayuda de su ronca voz, que da origen a su acertado apodo.

Altar en donde las rezadoras realizan el tradicional rosario de Día de Muertos, en Ejutla de Crespo, Oaxaca.
Altar en donde las rezadoras realizan el tradicional rosario de Día de Muertos, en Ejutla de Crespo, Oaxaca.

Su sencillez, reflejada en la guayabera azul y los huaraches de pata de gallo que viste, transmite confianza a quienes buscan en él la fe y la resignación para encontrar paz espiritual. Desde el nivel de su sombrero de paja al suelo que pisa, lleva consigo humildad y respeto a los rincones donde hay luto y escasa armonía debido a una muerte.

Este hombre ejuteco narra la historia del encuentro espiritual que marcó su trayectoria como rezador y que gracias a lo cual pudo establecer una comunicación con su padre Dios, como le llama a ese ser superior.

 

 

 

[pull_quote_center]“Para descansar en paz, mi padre se acercaba a mis sueños. Eran las 3:30 de la madrugada y sin poder conciliar el sueño tenía que levantarme a rezar 10 aves marías y 5 padres nuestros para que su alma dejara de aturdirme cada noche  mientras reposaba en mi cama”, recuerda.  Asegura que a muchos, como él, de una u otra manera les ha tocado vivir algo similar.  [/pull_quote_center]

 

¿Cómo describir a un rezador, a su quehacer?

Padre Wilfrido Mayrén.
Padre Wilfrido Mayrén.

El sacerdote Wilfrido Mayrén Peláez describe a un rezador como una persona que ora, que pide, que busca, que lleva en su pecho un escapulario y en sus manos un rosario, y funge como enlace espiritual entre la Tierra y el Cielo.

La existencia de esta figura religiosa obedece a que después de la Conquista, una vez impuesta la religión católica en el país, había muy pocos sacerdotes para atender a toda la población, por lo que la gente aprendió a rezar el rosario por sí sola. Esto, explica el padre Mayrén, dio origen a los famosos rezadores, que generalmente son varones de edad avanzada. El padre destaca el valor de esta figura.

 

 

Prospectivas para el rezador

El señor Adrián observa dentro de las nuevas generaciones de rezadores algunas cosas negativas, por ejemplo, que mucha gente ha tomado este compromiso como un negocio: hay rezadores que para los novenarios dicen “cobro tanto”, y la gente lo paga. 

Es así como las palabras de Don Adrián hablan por otros rezadores de municipios cercanos a la capital del estado, queriendo encontrar a más laicos que puedan disfrutar de esta práctica y no la vean con más interés que la sola devoción.

Y cierto es que no solo el factor económico ha irrumpido este oficio: hoy en día se vive una transformación de los valores, la cual se imprime también en estas prácticas por parte de los sucesores de esta generación de rezadores, de acuerdo con la perspectiva del apoderado legal de la Arquidiócesis de Oaxaca, párroco Wilfrido Mayrén Peláez.

“Mucha gente lo ha tomado como negocio. Hay rezadores que ya hasta para los novenarios dicen ‘bueno, pues yo cobro tanto’, y la gente lo paga y los busca. Hay gente que no lo está haciendo por negocio sino por fe, por vocación”, precisa.

Rezadores-3
¿Próximos rezadores? Niños que participan en actividades religiosas en Ejutla de Crespo.

La vigencia de los rezadores tradicionales está en su etapa final, augura el padre, pero señala que a ésta le precede una nueva figura, la de los jóvenes misioneros.

“Los rezadores a la antigua sí se están extinguiendo… a la antigua sí, porque a la antigua era como la costumbre y la tradición. Hoy ya estamos viviendo en la Iglesia una nueva etapa, ya no por costumbre, ya no por tradición, sino por vocación y como parte del ejercicio de la fe”, expresa.

? Pero, ¿qué está provocando que este oficio tradicional esté al borde de la extinción? 

“Yo creo que hay varios factores que influyen a que se vayan extinguiendo. Una razón que yo considero muy importante es que cada vez las familias le dan menos importancia a las cosas de la fe. En la familia se va perdiendo el sentido profundo de la fe, de Dios, de la Iglesia… se va perdiendo”, responde.

A través de la charla con el padre Wilfrido nos hemos podido percatar de este fenómeno, en el que también intervienen muchos otros factores, los cuales van ligados más con las nuevas tecnologías y las actividades en que las personas suelen invertir sus tiempos. De manera ulterior, todo esto se explica en el actual sentido de la vida.

[pull_quote_center]“La gente tiene cada vez menos tiempo. Vivimos una vida loca, un torbellino de actividades. Todo mundo se levanta y así corriendo a bañarse, a almorzar, y esos son los nuevos tiempos que nos generan incluso enfermedades nuevas. Antes no existía el estrés; hoy hay estrés porque uno está preocupado, angustiado. Tenemos estos aparatitos que nos ayudan mucho pero que también nos esclavizan”, describe, dejando ver la manera en que las personas nos hemos enajenado con las nuevas tecnologías, lo que ha propiciado el cambio de valores y perspectivas. [/pull_quote_center]

  • “Hoy a la gente le parece una pérdida de tiempo el estar media hora ahí reza y reza y reza, pues mucha gente prefiere meterse ahí, al Twitter, al Facebook, hasta el WhatsApp o ver la televisión, no sé, ver películas, pasear o jugar fútbol… entonces son factores que hoy están influyendo”, añade.

Y continúa con su reflexión: a través del tiempo los seres humanos nos vamos adaptando a lo que la vida nos va ofreciendo; es difícil para muchos hacerse de la vista gorda e ignorar lo que sucede en nuestros tiempos. La vida está cambiando; nuestros tiempos ahora son muy diferentes a los tiempos de hace muchos años atrás. Por la pérdida de esos valores los rezadores ya no toman esta práctica como una vocación hacia Dios, concluye el padre Wilfrido.

 

Por la fe, lo imposible es posible

Doña Angelina Ortiz Cruz, retadora oaxaqueña.
Doña Angelina Ortiz Cruz, retadora oaxaqueña.

Angelina Ortiz Cruz, con más de 50 años como rezadora, lleva en sus manos rugosas y en su sonrisa la experiencia de toda una vida ejerciendo lo que ella llama la razón de su existencia. Para esta mujer, la devoción se encuentra en todas las personas, pero al momento de rezar, solo unas pocas saben cómo hacerlo.

Una de las historias que nos comparte es la experiencia de haber vestido a una difunta.

Siendo la primera vez que lo hacía, estaba muy nerviosa: le temblaban las manos, no sabía qué hacer… y en esos momentos encontró la solución: ponerse a rezar y pedirle a Dios que la fallecida no se moviera y que le permitiera vestirla para poder orar por su alma y su eterno descanso. Pasados los minutos pudo llevar a cabo la acción y desde ese momento jamás le volvió a tener miedo a los muertos, demostrando que la fuerza más grande que tienen las personas es la oración.

Sin embargo, dice, con el paso de los años, el interés por la religión es cada vez menor debido a que las personas tienen otros intereses y no se dan el tiempo necesario para acercarse a la Iglesia, lo que se refleja en quienes ni siquiera se saben persignar o decir una simple plegaria.

Esta rezadora oaxaqueña menciona que en el tiempo ha visto a muchas generaciones pasar y ver cómo cada vez son menos las personas interesadas en los sacramentos religiosos. Advierte que un grupo importante son los niños y las niñas, quienes deben tener la fe suficiente, puesto que son el reino de Dios, por lo que es muy importante que sepan rezar y que conozcan la religión católica. La vida eterna ?advierte? es un hecho confirmado; basándose en la Biblia, se sabe que, con la muerte, el alma sigue con vida; lo que muere únicamente es el cuerpo.

Rezadores-5
Procesiones dirigidas por rezadoras y rezadores de Oaxaca.

El ser rezadora, para esta mujer, es “un compromiso, una vocación, una forma de vivir”. Para quienes quieren ser verdaderamente entregados al Señor, ésta es una gran oportunidad, asegura Angelina: cuando te das la ocasión de conocer todo lo que hay dentro de la Iglesia ya nunca más querrás salir.

[pull_quote_center]“No hay acto más grande que la fe, aquella que nos lleva a creer que lo imposible es posible”, dice. Angelina cree que todo esto es posible si al menos conocemos un poco de quién es nuestro creador y por qué estamos en este mundo.[/pull_quote_center]

Argumenta que si cada persona buscara su vocación, los sucesos dentro de la sociedad serían diferentes. Para ella existen cosas que se transmiten de generación en generación; hay quienes aceptan su camino mientras que otros, por su parte, deciden hacer las cosas más sencillas y evitar un compromiso y esto sucede porque no sabemos dividir nuestros tiempos y no sabemos darle un espacio a la fe. Llegamos a creer ?continúa? que la solución más fácil es el dinero y que con él todo se resolverá, pero quien piensa eso es la persona más desdichada que pueda existir en la humanidad, y esto solo muestra su falta de compromiso con lo realmente importante, que es Dios.

Las últimas palabras que Angelina Ortiz nos regaló fueron: “Busca tu camino y lo encontrarás”.


* Estudiantes del quinto semestre de la Licenciatura en Comunicación, de la Universidad Mesoamericana. Este reportaje fue entregado como trabajo final del semestre en la materia de Periodismo, el pasado mes de diciembre de 2015.

Últimas noticias

Por su inagotable pliego de demandas, otra vez S-22 vuelve a las calles

Jaime GUERRERO OAXACA.- Para exigir cumplimiento a sus peticiones laborales y económicas, plasmados en su inagotable pliego de demandas, la...

Denuncian a candidato al Senado del PT en Oaxaca por violencia política

Jaime GUERRERO Hita Ortiz Silva, militante del Partido del Trabajo, presentó una denuncia por violencia política por razón de género...

Infonavit acerca sus créditos y soluciones de pago a derechohabientes del Istmo

OAXACA.- El Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) realizará Ferias de Servicios en los...

Arrojan escombros de obra del Interoceánico frente a casa de ambientalista

Diana Manzo Unión Hidalgo, Oax.- El ambientalista Edgar Martín Regalado denunció que un volteo arrojó basura, escombro y tierra frente...

Quizá te pueda interesar
Recomendaciones para ti