Ahora, ha dicho el primer ministro conservador, corresponde a los británicos tomar «una de las decisiones más importantes de sus vidas».
Reino Unido, insistió, gozará de «un estatus especial» de la UE: «Estaremos fuera de las partes de Europa que no funcionan para nuestro país».
«No amo a Bruseles, amo a Reino Unido», ha añadido.
“Es uno de mis mejores y más viejos amigos pero lleva unos treinta años deseando que Reino Unido salga de la UE”, dijo el primer ministro.
Las ayudas a los hijos de migrantes europeos que vivan fuera de Reino Unido se pagarán a un tipo basado en el coste de vida de su país de origen.
Fuente: http://elpais.com/internacional/2016/02/20/actualidad/1455964545_700727.html