Compartían la emoción de participar en una campaña política por primera vez y contrastaban con las abuelas latinas (sus abuelas) que hacen campaña por Clinton.
Huerta está metida de lleno en la campaña de Hillary Clinton tocando puertas para pedir el voto en las primarias.
La esperanza para Sanders está en que él tiene mucho más tirón entre los jóvenes que Clinton.
En el cuartel general de la campaña de Clinton se notaba el viernes a mediodía cierto hartazgo con el cacareado momentum de Sanders.
Para frenar ese fastidio, Nevada debería ser el cortafuegos de Hillary Clinton.
Fuente: http://elpais.com/internacional/2016/02/20/actualidad/1455965916_684864.html