Así que WhatsApp ha pasado de ser una aplicación que permite enviar mensajes a ser una aplicación que casi te obliga a mandar mensajes.
En ocasiones cuando una conversación de trabajo por WhatsApp amenaza con ser interminable decido llamar por teléfono sin más.
Cuando ya estaba a punto de terminar mi mes sin WhatsApp un día tuve que volver a darme temporalmente de alta.
Al volver a usar de nuevo WhatsApp el cuatro de noviembre me percaté de que había dejado atrás algunos malos hábitos.
Descubrí que cuando borras tu perfil en WhatsApp las personas que alguna vez han chateado contigo te pueden seguir mandando mensajes.
Fuente: http://verne.elpais.com/verne/2015/12/10/articulo/1449744876_955885.html