Pedro MATÍAS
OAXACA, Oax. (pagina3.mx).- Pese a que Oaxaca ha sido calificado como un “bastión” de Andrés Manuel López Obrador, las asambleas del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) para definir a los que serán candidatos plurinominales a las diputaciones locales han sido casi clandestinas para imponer candidatos externos o afines al “candidato invisible”, en clara referencia a Salomón Jara Cruz.
La sospecha de que han excluido a las verdaderas bases de Morena es la escasa información que dio el Comité Ejecutivo Estatal sobre la realización de las Asambleas, ya que apenas el 18 de febrero a las 19:00 horas informó, vía Facebook, acerca de las reuniones, la sede y el horario, es decir, 12 horas después de los eventos.
Por si fuera poco no informó que en la capital de Oaxaca se realizarían dos asambleas, una para la zona norte y otra para el sur del municipio capitalino.
Según algunos militantes, la escasa asistencia a las asambleas del pasado viernes tienen dos explicaciones, la primera es el desaliento por la postulación de Salomón Jara Cruz como candidato a la gubernatura de Oaxaca y la segunda a que fue una estrategia para imponer a su “clientela política” o a los “maromeros de la política” que ahora pretenden imponer como externos.
Para reforzar su dicho, mencionaron que las asambleas de “Morena” en varios distritos para elegir a sus candidatos plurinominales fue una “tómbola” porque tan solo en el Distrito Electoral 22 que comprende el norte de la capital, al Club de Leones solo llegaron alrededor de 70 “morenos” cuando se dispuso de un amplio salón y mil sillas.
Mientras que en el Distrito 12, cuya asamblea se realizó en el municipio de Santa Lucía del Camino, asistieron apenas 54 militantes y naturalmente la votación correspondió a la asistencia escasa.
Los escasos asistentes cuestionan al candidato de López Obrador la gubernatura porque solo hace presencia en comunidades rurales adonde llegaron los apoyos económicos de los programas de gobierno durante los tres años en que estuvo en el gabinete de Gabino Cué y donde formó su clientela política.
Y las otras asambleas fueron sorprendidas por los maromeros de la política: Flavio Sosa, César Mateos, los «Chendos» Rosendo y Félix Serrano, Othón Cuevas y el ex ulisista Armando Contreras.
Los fundadores de Morena consideran que si en 2015 fue una derrota, ahora será un desastre y podrían perder hasta el registro, lo que es pero Morena Oaxaca podría ser ¿el último clavo en el ataúd?
Explicaron que el partido político que nació como “la esperanza de México” y Oaxaca su “bastión lopezobradorista”, parece esfumarse porque será controlado por un grupo de perredistas, exfoxistas y muchos políticos “externos”.
Y en estas Asambleas se definirán los candidatos a diputados locales “pluris”, aquellos que integran la primera línea de los privilegiados, los que ni hacen campaña ni sudan la camiseta; simplemente gozan la chequera pública.
Y dejan una serie de preguntas al aire: ¿por qué se mantiene el secretismo en el Comité Ejecutivo Estatal que ha sido propio de Salomón Jara, el exulisista Armando Contreras y su grupito inmediato?, ¿por qué esas pruebas de antidemocracia en el partido que la ejercería plenamente, según López Obrador?
La respuesta es que será el acarreo, la tamaliza, el reparto de dinero al mejor estilo priista o la venta nocturna de candidaturas lo que prevalecerá.
