Y poco más, pese a que los funcionarios europeos destacan que la inmigración española hacia Reino Unido es cada vez más importante.
El Gobierno español defendió este miércoles en Madrid el acuerdo con Reino Unido ante el escepticismo o el rechazo de los partidos.
A París le preocupa la City: que Reino Unido pueda aplicar regulación más laxa a sus bancos y deje a los competidores europeos en inferioridad de condiciones.
Reino Unido supone el 12,7% de la población europea.
Londres quiere también victorias simbólicas: el texto final dejará claro que Reino Unido no participa del leitmotiv de la UE, “una unión cada vez más estrecha”.
Fuente: http://elpais.com/internacional/2016/02/18/actualidad/1455750214_628807.html