El desplome este viernes de Weight Watchers es suficiente para comerse 40 millones de dólares (unos 38 millones de euros) de la fortuna de Oprah Winfrey.
Los inversores que esperaban que Oprah Winfrey resucitara la compañía de adelgazamiento se están llevando este viernes las manos a la cabeza, porque no les salen las cuentas.
Y las señales que llegan de Weight Watchers no gustan.
Las ventas en el cuarto trimestre, las que incluyen el efecto Oprah, cayeron un 20% cuando se compara con el mismo periodo de 2014.
Para ella, además, la operación sigue saliendo a ganar porque compró las acciones a un precio de ganga, a 6,79 dólares la unidad.
Fuente: http://elpais.com/elpais/2016/02/26/estilo/1456495517_084144.html