En menos una semana, el ejército mexicano ha abierto sus filas para que la justicia investigue dos supuestos casos de desaparición forzada.
“La presión internacional y de las organización de defensa de los derechos humanos es muy importante.
“Las fuerzas armadas enfrentan un proceso muy complejo, que pasa por internalizar el respeto a los derechos humanos.
Las primeras diligencias todavía son casi siempre llevadas por la justicia castrense”, apunta Carlos Zazueta, investigador de Amnistía Internacional México.
A los cinco días, los familiares de García reconocieron su cuerpo descompuesto en la camilla de los forenses.
Fuente: http://elpais.com/internacional/2016/03/14/mexico/1457992661_851133.html