Tampoco creo que los fracasos sean resultado de «la mala suerte», sino las consecuencias de nuestros errores: naufragamos cuando no hacemos bien las cosas en el momento correcto.
Tras conocerse los tres ganadores, un amigo me escribió eufórico para comentar el suceso: «Ismael, la suerte sí existe».
La suerte existe, pero es «loca», como dice el refrán.
No pongamos el énfasis en acumular objetos, sino en iniciar una transformación personal, el único modo de ser realmente «ricos».
Por supuesto, me alegra la fortuna que cualquiera pueda alcanzar por vías legítimas, pero pienso que los «golpes de suerte» o «regalos divinos» son hechos muy aislados.
Fuente: http://cnnespanol.cnn.com/2016/03/09/la-suerte-verdadera-existe-pero-es-loca/