El ser humano, convertido en mercancía en el trabajo y consumidor adicto de mercancías muchas veces inútiles, se deshumaniza cada vez más.
En este campo es también fundamental la defensa de los maestros, que son superexplotados y de quienes depende la formación de los niños.
El triunfo de ésta se prepara a partir de dos factores fundamentales.
Por otro lado, con el desarrollo moral mediante la creación de relaciones de compañerismo y de fraternidad que permitan arrancar a las nuevas generaciones de la influencia nefasta de la ideología que propaga el capitalismo por todos los medios.
Sin embargo, como demuestran las bases del EZLN, es posible combatir contra esta imposición capitalista desarrollando experiencias autonómicas, impidiendo la difusión de las drogas, el alcohol, la prostitución e impulsando la ayuda mutua, el tequio y todas las formas de solidaridad y de control colectivo de la vida social.
Fuente: http://www.jornada.unam.mx/2016/03/13/opinion/015a1pol