El próximo sábado Juan Villoro recibirá –muy merecidamente—el Premio Excelencia en Letras José Emilio Pacheco y con ello se inaugura la Feria Internacional de la Lectura Yucatán en la blanca ciudad de Mérida.
En el enrarecido mundillo donde se confunde la crítica con el amiguismo, sostengo que el cada día creciente grado del afecto que le tengo a Juan Villoro no estorba ni afecta la admiración que le tengo a cada nueva entrega de su talento.
México es mucho más que el alud de malas noticias y enredos tragicómicos de empoderados telenoveleros que lo mismo fardan corbatas con mentiras políticas que raídas camisetas del crimen.
El Premio Pacheco a Juan Villoro es un salvoconducto de esperanzas: nos quedan muchos años y muchos libros por leerle y muchas ocasiones para compartir con él sus hondas pasiones por el fútbol o el rock de veras, las letras del mundo y las increíbles noticias que se convierten en testimonio con sus columnas.
Blog: Café de Madrid
Fuente: http://elpais.com/internacional/2016/03/08/mexico/1457468758_989212.html