La de Keiko Fujimori el domingo pasado, con trucos retóricos que recordaron los de su padre, asesorado por Montesinos, pudiera ser una de ellas.
El debate entre dos candidatos definitorios es lo más parecido al duelo entre los campeones de dos grupos enfrentados.
¿Tendrá Kuczynski los arrestos suficientes como para silenciar ese nido de ametralladora en el siguiente y último debate, este domingo 29?
Aunque no siempre, suele prefigurar el resultado final del conflicto, levantar la moral a unos y deprimir la de los otros.
Está claro que sí se puede, aunque no le resulte agradable: llamar a votar por Kuczynski.
Fuente: http://elpais.com/internacional/2016/05/24/america/1464115409_666157.html