Gideon Levy y Yehuda Shaul, que están presentes, se declaran de acuerdo.
Yehuda Shaul no se siente intimidado y no piensa hacer ninguna concesión.
Son miles de justos, pero no lo bastantes para rectificar ese movimiento que empuja a Israel hacia la intransigenciaSí, lo hay, el de los justos, muchos, aunque no sean tantos como para ganar las elecciones.
La verdad es que, desde hace años, las pierden, una tras otra.
Yehuda Shaul es uno de ellos, en nuestros días.
Fuente: http://elpais.com/elpais/2016/06/24/opinion/1466766257_321656.html