Paul Reiche, el fundador de Toys for Bob, comparte con John Lasseter, director de Toy Story, su capacidad para soñar como un niño.
Por eso todo niño ha imaginado esa mágica posibilidad de que sus juguetes (sus amigos) hablen, caminen y, en definitiva, vivan como nosotros.
Un paso más para que Buzz Lightyear haga realidad su promesa de acompañarnos “hasta el infinito y más allá”.
Una humanización que es universal; de ahí, precisamente, el éxito de la película de Walt Disney y Píxar.
La tecnología actual, sin embargo, permite ver aquellos experimentos como una ingenua puerta a la modernidad.
Fuente: http://one.elpais.com/juguetes-cobran-vida-delante-tus-ojos/