Pero fue otro estilete menudo, Tecatito Corona, el que rescató a México.
México inclinaba cada vez más el campo y en uno de esos arrebatos apareció Corona.
Quizás por un exceso de confianza del técnico, Chicharito Hernández saltó al campo pasado el descanso con el alzacuello de salvador.
México está jugando este torneo casi como segundo anfitrión y además está fabricando buen fútbol.
Entró Layún y entró Chicharito, que se persignó como siempre pero esta vez nadie bendijo su gol.
Fuente: http://deportes.elpais.com/deportes/2016/06/14/actualidad/1465876233_627422.html