Fue un momento realmente devastador para mí al pensar cómo el espíritu humano de la gente allí se ha apagado con los años”, añade en una entrevista telefónica.
De los 61 reos que hay en Guantánamo, solo siete están acusados de algún delito y tres están condenados.
Mi pensamiento fue que, si eso ocurriera, la gente [en Guantánamo] se rompería psicológicamente por todo a lo que han sido sometidos”, explica la abogada Pardiss Kebriaei.
Su motivación inicial eran los derechos de los presos de Guantánamo, no si las atrocidades en las que justificó su arresto eran ciertas.
Veinte han sido autorizados a salir -algunos hace años- si se encuentra un país que quiera acogerlos bajo un régimen inicial de semilibertad.
Fuente: http://elpais.com/internacional/2016/08/21/estados_unidos/1471745983_496690.html