En este último apartado entraría la piscina olímpica de Río de Janeiro.
Un socorrista en la piscina olímpica de Río.
En los Juegos Olímpicos de Seúl, en 1988, el estadounidense Greg Louganis se golpeó en la cabeza con el trampolín en un salto.
La agencia AFP ha entrevistado a Josue Ribeiro dos Santos, uno de estos socorristas, quien declaró: «Gracias a Dios que me contrataron».
Prado se refiere a una ley aprobada en 2001 que exige la presencia de socorristas permanentemente en complejos residenciales, en hoteles y en clubes deportivos.
Fuente: http://verne.elpais.com/verne/2016/08/08/articulo/1470647818_946259.html