Su obsesión es que cualquiera pueda tener su tienda lista, escaparate o página web, para ofrecer sus servicios en cuestión de minutos.
Y sabe que el español, tanto en España como en América Latina, es la clave para seguir creciendo más allá de Estados Unidos, de ahí que lance la versión de su web en idioma español.
En 2009, todavía viviendo en la Universidad de Penn, de la elitista Ivy League de la Costa Este, ya era rentable.
Para llegar a ello habló con muchísimos emprendedores para entender así sus necesidades: “Muchos tenían una idea pero no conocimientos técnicos.
En noviembre de 2008 puso en la web una versión de autoservicio.
Fuente: http://elpais.com/tecnologia/2016/08/09/actualidad/1470732151_289497.html