A la hora de trabajar con ingenio y pocos medios Latinoamérica es una escuela para el mundo.
Y lo segundo cambiar su forma de pensar la arquitectura para terminar transformando la vida de la comunidad.
La arquitectura que escucha y entiende los lugares y las personas, en lugar de imponer teorías o modus operandi apriorísticos es, efectivamente, transformadora.
Y las más potentes apuntan hacia un cambio: la arquitectura hecha desde abajo, a partir de las necesidades y no desde la planificación teórica.
El primero sentenció que “a pesar de que en muchos países latinos hay crisis, es evidente que la arquitectura iberoamericana no está en crisis”.
Fuente: http://elpais.com/cultura/2016/10/17/actualidad/1476692134_790452.html