Si la medicina y la farmacia científicas quieren preservar el prestigio que les convierte en agentes de salud fiables, no pueden hacer concesiones de este tipo.
Como también resulta del todo inaceptable que la homeopatía sea objeto de cursos de posgrado en universidades e incluso cuente con secciones específicas en colegios de médicos y farmacéuticos.
Los farmacéuticos se basan en que los productos homeopáticos no han demostrado eficacia terapéutica en ensayos clínicos controlados.
Por una parte, la evidencia científica niega el carácter de medicamentos a estos productos.
De hecho, no han demostrado un efecto mayor que el que se obtiene con cualquier placebo sin principio activo en ensayos a doble ciego.
Fuente: http://elpais.com/elpais/2016/10/02/opinion/1475426920_284498.html