Bien pensado, tal vez debería ganarlo Edna O’Brien: ¿para qué dárselo a Philip Roth si puedes dárselo a la escritora favorita de Philip Roth?
No pasaría nada porque lo ganase uno más –Philip Roth, por ejemplo-, pero tampoco estaría mal que nos dijeran en Estocolmo quién es el Philip Roth africano.
También repiten Murakami, Adonis, Ko Un, Jon Fosse y, por supuesto, Philip Roth.
Para eso está el Comité Nobel, que es solo un club de lectura cualificado, no el tribunal supremo de la justicia literaria.
El segundo factor, el nacionalismo, nos lleva a suspirar por un paisano nuestro solo por el hecho de serlo.
Fuente: http://elpais.com/cultura/2016/10/11/actualidad/1476207995_992510.html