Cada vez vendemos más vestidos con escotes profundos en uve, al igual que otros muchos con copas muy reveladoras”.
Lo confirman desde el departamento de diseño de corsetería de la firma Intimissimi: “Las nuevas tendencias van cada vez más hacia modelos mórbidos y sin relleno.
Cierto o no, parece que hoy podemos desterrar esa preocupación; aquel generoso escote con canalillo tan de los noventa ha muerto.
Para el diseñador español afincado en Londres Emilio de la Morena la declaración de Vogue es una simple cuestión de tendencias.
En general, la demanda de las clientas tiende hacia sujetadores sin aro, ligeros y refinados sin renunciar a la sensualidad”.
Fuente original: ¿Adiós a los escotes? | Estilo | EL PAÍS