Pedro MATÍAS
OAXACA, Oax. (pagina3.mx).- Ni el gobierno de Alejandro Murat Hinojosa ni la secretaria de Asuntos Indígenas, Sofía Castro Ríos, se han pronunciado en defensa de la comunidad de San Juan Bautista Tlacoatzintepec que denunció que la marca española Intropia presuntamente plagió el diseño de su huipil chinanteco.
En los últimos tres años, indígenas mixes, zapotecas y ahora chinantecas, denunciaron que diseñadores extranjeros plagiaron elementos y patrones gráficos que componen y representan la identidad de los pueblos originarios de Oaxaca.
En junio de 2015, las autoridades municipales de Santa María Tlahuitoltepec denunciaron que la diseñadora francesa Isabel Marant plagió el diseño sus blusas mixes Xaamïxuy, prenda que expuso en su colección “Etoile” primavera-verano 2015.
Posteriormente, en agosto de 2016, habitantes zapotecas de San Antonino Castillo Velasco, denunciaron que la marca argentina Rapsodia plagió el diseño tradicional de la blusa de la comunidad, para presentarla en su colección de invierno 2016 con el nombre de “Marion Missy”.
Ahora, los chinantecos de San Juan Bautista Tlacoatzintepec, denunciaron, a través de su página de Facebook, que la marca española Intropia plagio diseños oaxaqueños precisamente del huipil que incluyó en blusas y vestidos, lo que calificaron como “un verdadero despojo a nuestra cultura y a nuestra historia”.
A una semana de que los chinantecos se quejaran que la marca española se plagió motivos de su huipil del diario, cuestionaron que “por más que intentamos preservarlas ellos no se esfuercen en nada para conocer un poquito más de nuestra cosmovisión”.
Su molestia radica en que la publicación de Intropia hace referencia a un bordado azteca, lo cual es totalmente incorrecto. Nos molesta mucho que copien nuestros diseños porque no saben ni siquiera lo que significa el bordado del textil, y todos los elementos que lo integran”.
Explicaron que ahora “este huipil en su tienda (Intropia) tiene un costo de 198.00 Euros”, razón por la que urgieron a las autoridades a tomar iniciativas que protejan a los pueblos originario de tales despojos.
Mientras que en los huipiles de Tlacoatzintepec se muestran aves y otros motivos que reflejan parte de su cultura, la marca de moda española las describe las prendas como un “vestido midi bordado con detalles en zig-zag”.
Lo extraño es que las autoridades estatales no han salido en defensa de la comunidad indígena, aunque ya se alistan eventos para conmemorar este 21 de febrero el Día Internacional de la Lengua Materna, toda vez que en Oaxaca se preservan 16 lenguas originarias.
En estos tres casos, la comunidad indígena cuestiona a sus autoridades tanto federales como estatales: “¿Qué es lo que hace el Estado mexicano para proteger los derechos colectivos de los pueblos indígenas, pues hablamos de arte, de conocimientos tradicionales, plantas, animales, gastronomía, cuando hay cosas tangible e intangibles que han sido plagiados?”.