El capo mexicano Joaquín «Chapo» Guzmán fue declarado culpable este martes de los 10 delitos de los que era acusado por liderar un imperio criminal que traficó toneladas de drogas a Estados Unidos durante 25 años, por los cuales enfrentará cadena perpetua según la ley estadounidense.
Tras el veredicto leído por el juez Brian Cogan en la corte federal de Brooklyn, el exjefe del cartel de Sinaloa, de 61 años, saludó a su esposa Emma Coronel con la mano.
Coronel, de 29 años, vestida con pantalones ajustados negros y una chaqueta verde, le levantó el pulgar de la mano derecha, se cruzó las manos en el pecho y le tiró un beso antes de que los alguaciles retiraran al Chapo rápidamente de la sala.
El jurado anónimo que encontró al mexicano culpable de narcotráfico, lavado de dinero y uso de armas de fuego se compuso de ocho mujeres y cuatro hombres, quienes informaron su veredicto en el sexto día de deliberaciones.
Algunas de las evidencias presentadas por la Físcalia fueron declaraciones de 14 delincuentes que cooperaron con las autoridades. Muchos hablaron sobre la voluntad de Guzmán para usar la violencia en contra de sus enemigos.
Según la Fiscalía, el cartel del capo mexicano traficó al menos 200 toneladas de cocaína a Estados Unidos durante más de dos décadas.
¿Cuándo y cómo se inició en el crimen?
El capo empezó a traficar marihuana desde muy joven, y en poco tiempo, su grupo prosperó hasta convertirse en uno de los más importantes de Sinaloa. Ingresó al Cartel de Guadalajara, fundado por Miguel Ángel Félix Gallardo en la década de 1970, donde inició como gatillero y así se mantuvo hasta que en 1989, el líder de esta organización delincuencial fue detenido y su imperio se dividió entre sus principales lugartenientes.
Salto a la fama y fugas
La tarde del 23 de mayo de 1993 el nombre del Chapo saltó a la fama cuando el cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo fue asesinado en el Aeropuerto de Guadalajara. En aquel entonces, la Procuraduría General de la República informó que el jerarca católico fue confundido con El Chapo por sicarios del Cartel de Tijuana, enemigos del sinaloense. Semanas después, fue detenido por primera vez en Guatemala.
Sus fugas de penales federales se hicieron célebres: una de Puente Grande en Jalisco el 19 de enero de 2001 y la segunda del penal del Altiplano en el Estado de México el 11 julio 2015.
