Horacio Corro Espinosa
Todo habitante de la ciudad de Oaxaca sabe que sus calles están destrozadas, y para transitar en ellas es un verdadero martirio.
Al rodar sobre los baches invisibles, porque están llenos de agua, han ocasionado los accidentes más increíbles: personas que se han fracturado las costillas, o cuando no, se les ha caído la retina de los ojos, y en fin. Por esas desgracias nadie se hace responsable.
Ayer, unos inocentes ciudadanos se pusieron a tapar los profundos baches en uno de los cruceros del parque del amor, y por ese hecho, llegó la policía municipal a retirarlos del lugar. El argumento: que no contaban con los permisos para realizar tal obra. Además, les levantaron su infracción por obstruir la vía pública, cuando ese lugar, donde se paró el vehículo con el material para los baches, siempre es ocupado por taxistas que esperan levantar pasaje.
Este hecho solo pudo ocurrir en Oaxaca. ¡Increíble!
Pero toda esa acción policiaca tiene una explicación positiva, que muchos oaxaqueños ni se imaginan. El presidente municipal de la ciudad de Oaxaca, Oswaldo García Jarquín, como buen integrante de la 4T, tiene otros planes con los baches oaxaqueños: convertirlos en instalaciones deportivas para que todo aquel interesado pueda practicar la natación prolongada en nado de pecho, de mariposa, de muertito, o si quiere, podrá tomar clases de ballet acuático.
García Jarquín, sabe que esos hoyancos le darán la oportunidad de despertar simpatías entre aquellos que no aprendieron a nadar cuando eran bodoques.
En otras zonas de la ciudad, donde hay hoyos más profundos, los pretende convertir en círculos de alpinismo. Sabedor que todo mundo sale a la calle con su paraguas en mano en estos días de lluvias, estos podrán matar dos pájaros de un tiro. El paraguas podrá ser utilizado como piolet, propio para este deporte, lo que permitirá ascender o descender las cavernas que tendrán diferentes grados de dificultad.
Dentro del programa municipal que encabeza García Jarquín, también están contemplados los viejecitos, quienes tendrán la oportunidad de ejecutar sus primeros solitos a media calle para desarrollar su equilibrio.
Lo cierto es que los agujeros de la ciudad no fueron un descuido por parte de las autoridades, se dejaron crecer para economizar, eso sí, y a su debido tiempo proporcionar el beneficio físico y mental que la ciudadanía oaxaqueña merece.
Estos hoyos multifuncionales se distribuyeron del zócalo hacia los cuatro puntos cardinales de la ciudad. Y para economizar todavía más, por el tema de la pandemia, casi frente a tu casa encontrarás instalado uno de estos gigantes agujeros.
Esta es la razón por la que ayer los elementos policiacos defendieron con tanto ahínco los hoyos que atraviesan los cruceros del parque del amor.
Aunque no lo quieras creer, estas instalaciones se convertirán en deportivas y turísticas que, a corto plazo, será un negocio para unos, y centro de diversión para otros.
