Entre protestas y acusaciones de venta e imposición de candidaturas reciben a líder de Morena en Oaxaca
- Mario Delgado deja en manos de la Comisión de Justicia caso de Félix Salgado Macedonio acusado de violación sexual.
OAXACA, Oax. (pagina3.mx).- Entre protestas por la presunta venta de candidaturas e imposiciones de candidatos en Oaxaca, el dirigente del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
Mario Delgado Carrillo, pretendió evitar hablar sobre el caso del senador Félix Salgado Macedonio aspirante a la gubernatura de Guerrero.
Solo se limitó a decir que respetará la resolución del fallo la Comisión de Honestidad y Justicia de su partido.
Durante su visita a Oaxaca, el dirigente nacional de Morena se negó a abundar sobre el caso del precandidato a la gubernatura de Guerrero, quien es acusado de presuntos casos de violación, situación que ha dividido opiniones en su partido y al propio presidente de la república Andrés Manuel López Obrador que generó indignación entre las mujeres con su expresión “ya chole”.
En una atropellada conferencia de prensa convocada donde se dio portazo a representantes de los medios de comunicación, porque sus militantes intentaron entrar a un salón de un hotel del norte de la ciudad para cuestionar al senador Salomón Jara Cruz por la presunta venta de candidaturas, Delgado Carrillo dejó la responsabilidad a la Comisión de Honestidad y Justicia de Morena sobre el proceso que se sigue a Félix Salgado Macedonio.
“Hay un procedimiento que se está llevando a cabo actualmente por parte de la Comisión de Honestidad y Justicia que nosotros vamos a acatar, vamos a respetar su resolución, lo informaremos en su momento”, resumió.
Respecto a la división que ha generado entre las mujeres, colectivos y eso podría tener consecuencias el día de la elección, solo dijo que las diputadas y senadoras de Morena aprobaron reformas a la Constitución del país para garantizar la paridad de género en todos los espacios públicos, así como para ejercer sus funciones en un contexto libre de violencia.
Lo que sí hizo fue llamar “a la unidad, y ya estamos en eso. Morena va a refrendarse como un movimiento de lucha del pueblo mexicano. No le pertenece a nadie, no le pertenece a ningún grupo, y estamos atentos a no permitir vicios de otros partidos como el amiguismo, el nepotismo”, afirmó.
Sin embargo, afuera del salón seguidores de Morena golpearon a empleados del hotel, impidieron a la prensa ingresar y corearon consignas como: “Queremos encuestas no queremos dictadura, queremos respuestas no queremos la basura”.
“Mario Delgado no queremos imposiciones. Acusaron al presidente municipal de Xoxocotlán, el perredista Alejandro Jarquín que ahora quiere perpetuarse con su esposa ahora abanderada como Morena. Ya basta de tanta corrupción en Santa Cruz Xoxocotlán”.
Otro grupo acusó al senador Salomón Jara Cruz, quien fue a levantarle la mano a Félix Salgado Macedonio como candidato, de estar vendiendo las candidaturas.
Defendió que López Obrador continúe con las mañaneras porque “es un logro de la democracia, de la gente”.
Respecto a sus candidato, defendió que Morena es movimiento plural que “en 2015 tenían unas cuantas planillas y hoy tenemos cuadros de primer nivel. Hay interés legitimo de ocupar alguna posición, pero justamente venimos a convocar a los principales cuadros de Morena en este proceso de decisiones que todos nos comprometamos por el interés general sobre cualquier interés particular. Si hacemos eso, vamos a estar a la altura de la responsabilidad que tenemos en este movimiento”.
“En el caso de los que pretendan una elección hay que ganar la encuesta, aquí las decisiones las toma la gente. Donde no se ha hecho un buen trabajo la gente decidirá que no debe continuar. Estoy seguro que vamos a tener la madurez suficiente para tener los consensos posibles.
Y alardeó que “tenemos toda la posibilidad de ganar el gobierno de Oaxaca en el 2022 pero antes está el 21”.
