“La Baláhna” es un filme de la cineasta zapoteca, Xóchitl Enríquez que retrata el machismo y la violencia contra la mujer.
Diana Manzo | Fotos: Juan Cortázar
Juchitán, Oax. (página3.mx).- La pandemia es el resultado de “La Baláhna”, un filme de la cineasta zapoteca, Xóchitl Enríquez que retrata el machismo y la violencia contra la mujer.Fue grabado durante la etapa cúspide de la Covid-19 en el Istmo de Tehuantepec, Oaxaca.
En recientes días fue seleccionado en el Festival Sundance 2022, uno de los más importantes del cine internacional.
Xóchitl de 30 años de edad recuerda que durante la pandemia retornó a su natal El Barrio de la Soledad, en la región del Istmo de Tehuantepec y decidió retomar una historia que hace tres décadas le sucedió a una de sus familiares.
Lo más sorprendente es que todo fluyó, dice la joven que está emocionada de participar en este Festival.
Dijo que es una forma de mostrar internacionalmente su obra, que asegura es una forma de visibilizar los machismos con los cuales viven las mujeres indígenas.
“La Baláhna” es un rito que se practica en las comunidades indígenas del Istmo de Tehuantepec que destaca a la mujer pura.
De no serlo, es criticada, discriminada e inclusive rechazada, y fue entonces que la joven cineasta decidió contar esta historia donde participan actores locales y también de la Ciudad de México.
Xóchil celebra que la historia de “La Baláhna” haya sido con la participación de un equipo de producción también local.
Destacan Frank Martínez, director de arte; Juan Pablo Villalobos, fotógrafo; Kandy Mijangos en el diseño del vestuario, Gabriela Espinoza en el sonido, entre otras personas.
“Juntarnos y poder lograr un filme de calidad significa que lo somos nosotros«.
“Significa que hacer cine local y en comunalidad es la resistencia a contar historias que suceden a nuestro alrededor, como Baláhna«.
Un filme que retrata el machismo y la violencia contra la mujer
“No es más que una costumbre machista que deja secuelas en las víctimas, que son mujeres, y eso lo sé, porque pregunté, caminé y las escuché hablando”, relató.
La joven cineasta enfatizó que por desgracia todavía existe violencia patriarcal contra la mujer, todavía las niñas y mujeres siguen viviendo en un ambiente que violenta.
Y es que como experiencia propia relató que hay mucha diferencia entre un filme que se graba de manera comunitaria y otro que se hace en las ciudades.
“Aquí te sientes en confianza, todos hablamos, cooperamos, hacemos hermandad y comunalidad«.
“Y lo sentí porque esta obra ya comenzará a difundirse a nivel internacional, supongo que para el 2022 o principios del 2023 llegará a México, eso significa que estamos haciendo bien las cosas”, relató.
Como mujer, cineasta e indígena, Xóchil también se ha enfrentado al machismo y a la cultura patriarcal, pero por fortuna no en su comunidad, sino en su época de estudiante y recién egresada en la Ciudad de México.
“Por ser mujer te creen incapaz, si supieran que no es así, la mujer que hace cine tiene otra perspectiva de los temas«.
“Nosotras lo contamos de una forma más libre y que llegue a todos los sectores, digo, no se trata de competir, sino de hacer un cine que fomente inclusión”, agregó.
Por último, recalcó que seguirá escribiendo y produciendo más historias, pero también compartiendo sus conocimientos.
Se trata de que el cine siga vivo, que esas historias que viven las mujeres, de su territorio, se cuentan por mujeres, que sean ellas mismas las que las desempolven para producirlas.
