Diana Manzo
Oaxaca, Oax.- Con cartulinas, rezos y hasta llantos, la Cofraternidad de Pastores de Oaxaca junto con sus creyentes protestaron a propósito en el monumento a Benito Juárez, en el Cerro del Fortín.
Denunciaron que cuatro familias oaxaqueñas de la localidad de Cerro Cajón, del municipio de San Juan Lalana, fueron desplazadas por no profesar la religión católica.
Con desesperación ante lo que viven, reclamaron al gobierno de Oaxaca su derecho de libertad de creencia.
Expusieron que no es posible que las familias vivan fuera de su comunidad por el hecho de no congeniar con una religión diferente.
“Les robaron sus teléfonos celulares, destruyeron sus cosechas e incendiaron su casa de oración.
“Y hasta los golpearon y encerraron, eso no es posible, entonces exigimos un alto a esa intolerancia religiosa”, urgieron.
La manifestación la realizaron cerca de 50 personas, quienes exigieron al gobierno y a las autoridades que las cuatro familias vuelvan a su casa, pues ahí dejaron sus cultivos, animales y su vida misma.
“Es una exageración que desplacen a éstas familias por no ser católicas, exigimos a Salomón Jara que los regrese a sus casas.
“Es urgente que se calme la criminalización y se dé un alto a este tipo de racismo que daña la vida comunitaria de los pueblos”, dijeron.
Con rezos y hasta llantos de desolación señalaron que no van a permitir que más familias sigan viviendo un desplazamiento forzado por no profesar una religión que sea distinta a la suya.
En un comunicado, el titular de la Secretaría de Gobierno (Sego), Jesús Romero López, informó que ya se brinda atención en el municipio de San Juan Lalana por el conflicto de intolerancia religiosa que se presentó en Cerro Cajón, perteneciente a la agencia San Isidro Arenal.
Comentó que en relación con estos hechos, el 16 de agosto la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) realizó una diligencia en el lugar.
No obstante, por acuerdo de la asamblea, la comunidad procedió a la detención de cuatro personas de Cerro Cajón, quienes fueron recluidas en la cárcel de la comunidad.
Fueron liberadas horas más tarde tras un diálogo en el que participó la Delegación de Paz en la región.
Este conflicto social no es nuevo en Oaxaca, sucedió hace años en el poblado de San Francisco del Mar, “Pueblo viejo”, donde varias personas fueron desplazadas.