Diana MANZO/Corresponsal
TEHUANTEPEC,OAX., (pagina3.mx).- La tierra de la inmortal Sandunga: Tehuantepec, nuevamente se vistió de gala culturalmente hablando con la realización del Guendaliza’a rito a la espiritualidad indígena que en este 2015 cumplió 17 años.
El Guendalizaa que significa hermandad en castellano, ha sido un rito a la espiritualidad indígena mesoamericana, para rendir homenaje a los héroes, hombres y mujeres que participaron en la Rebelión de Tehuantepec en el año de 1660, con el propósito de independizar a la nación zapoteca de los españoles, hecho ocurrido 150 años antes de la Independencia de México.
El Guendalizaa en su edición número 17 reunió a trece delegaciones de danza folklórica y más de 500 artistas en escena, incluyendo músicos y bailarines quienes en casi cuatro horas de espectáculo cultural mantuvieron atentos a los más de 10 mil asistentes locales, estatales, nacionales e internacionales.
La música, voces, ritmos, colores y figuras a todo su esplendor, danzantes de las cinco etnias istmeñas- zoques, mixes, zapotecos, mixtecos, chontales y huaves- , artistas nacionales de la Ciudad de México y Guerrero e internacionales de El Salvador y Honduras engalanaron el escenario de la plazuela principal de Tehuantepec,
La interpretación de la banda musical Princesa Donají, originaria de Tehuantepec, fue la que con sus ritmos autóctonos zapotecos inauguró simbólicamente el evento cultural y con ello los aplausos de los espectadores, quienes reafirmaron con su presencia que la cultura mesoamericana está viva.
Al igual, con la presencia en el escenario de su fundador, Mario Mecott Francisco, historiador e ideador original del Guendalizaa acompañado de las autoridades municipales encabezadas por el alcalde de Tehuantepec, Donovan Rito García, y su esposa Nadia Clímaco, el evento arrancó oficialmente.
Posteriormente comenzaron a hacer presencia en el escenario las delegaciones de las etnias istmeñas quienes acompañadas de su banda de música en vivo mostraron a más de diez mil asistentes que las culturas de los pueblos indígenas sigue preservándose a pesar del tiempo.
El grupo de danza de San Pedro Huamelula fue uno de los más aplaudidos de la noche, cuyos integrantes representaron una de sus mayores tradiciones huaves: El casamiento de la lagarta, la cual representa para la cultura ikotjs un animal sagrado.
Los movimientos de pies y manos, la soltura del cuerpo y la belleza del rostro de cada uno de los bailarines, quienes la mayoría eran jóvenes, dio pie en el escenario a las delegaciones a nivel nacional, la náhuatl originaria de la Ciudad de México, la cual danzó el Baile del Conejo y del Guerrero, y los danzantes Amuzgos, del estado de Guerrero.
El gran cierre de la noche y lo más esperado fueron las delegaciones de danza provenientes de los países de Centroamérica, El Salvador y Honduras, las cuales recibieron aplausos multitudinarios.
Previo al cierre de la edición número 17 del Guendalizaa, Mario Mecott acompañado de la autoridad municipal entregó reconocimientos a hombres y mujeres de la región del Istmo que han impulsado con su esfuerzo y dedicación a preservar la cultura indígena de esta región oaxaqueña.
Orígenes del Guendalizaa
Mario Mecott Francisco, quien es profesor de Historia y conocedor de la cultura zapoteca, fundó el Guendaliza’ en Tehuantepec en el año de 1996 en su primera edición.
El historiador narró que como parte de su formación histórico-social y su pasión por la Antropología y Arqueología lo han llevado a ir a fondo de los orígenes de los asentamientos zapotecas en su natal Tehuantepec.
Esta pasión por conocer cómo surgieron las rebeliones de la lucha por defender lo propio, los asentamientos de su raza indígena, el zapoteco y el paso de la cultura en los pueblos indígenas, ha contagiado desde siempre y hasta este 2015 a Mario Mecott.
Su pasión por la cultura lo llevó a proponer en el año de 1996 -a través de un grupo de amigos literatos denominado Grupo Cultural Siado Guie’-, festejar con un evento cultural danzante los 500 años del asentamiento del Guiengola al que llamó Guendalizaa.
“Al leer al padre Vichido y a Wilfrido C. Cruz, analicé la importancia de realizar un tributo a la cultura zapoteca, lo propuse y se aceptó, la primera edición fue para conmemorar el asentamiento de los zapotecas, el Guiengola, un espacio arqueológico de nosotros y que se ubica en nuestras tierras”, expresó.
En su primera edición, el Guendalizaa convocó únicamente a delegaciones de danza de la región del Istmo y se realizó en la ribera del río Tehuantepe; sin embargo, al poco tiempo de haberse realizado Mario Mecott abandona el Grupo cultural y se incorpora a otro, el Diixha Goolaza.
Para 1997 y 1998 no hubo Guendalizaa, sino hasta el año de 1999 cuando se incorpora a la Casa de la Cultura de Tehuantepec y conoce a Marcos Petriz, por lo que de nueva cuenta Mario vuelve a poner sobre la mesa la importancia de hacer un encuentro de culturas y fue aceptado.
“En el año de 1999 y hasta este 2015 no hemos dejado un solo año de hacer este rito a la espiritualidad de etnias, el propósito importante es revalorizar que tenemos identidad, que estamos vivos y que pertenecemos a una cultura, en este caso la zapoteca y que eso nos debe llenar de orgullo”, manifestó.
Para la edición segunda del Guendalizaa, la realizada en el año de 1999, se incorpora homenajear también a los zapotecas que participaron en la rebelión del Lunes Santo, la del 22 de marzo de 1660, en donde por un año la región del Istmo de Tehuantepec se independiza de la colonia española, conformando el primer ayuntamiento democrático de América Latina.
“Aparte de la conmemoración del centro ceremonial Guiengola, los integrantes de la cultura tehuanepecana analizamos la importancia de la rebelión del 22 de marzo de 1660 y definimos que el Guendalizaa se haría para conmemorarlo, por eso lo celebramos los 20 y 21 de cada año y significa recordar que la libertad, la cultura y nuestra esencia están vivos y qué más que compartirlo con otros danzantes mesoamericanos”, añadió.
Cuenta Mario Mecott que el Guendalizaa en su segunda edición era mínima la presencia de las personas, pero conforme ha pasado el tiempo se han acercado más y más hasta ver reunidos a cerca de 10 mil.
“El Guendalizaa ha tenido cuatro importantes etapas, la primera se llamó Encuentro Étnico del Istmo de Tehuantepec con la presencia de chontales, zoques, ikotjs o huaves, mixes, mixtecos y zapotecos, la segunda se fortaleció aún más con la presencia de delegaciones del estado de Oaxaca, posteriormente hicimos la invitación a estados del interior de la República Mexicana como Chiapas, Veracruz, Michoacán, Tabasco, Yucatán y otros más, y finalmente a partir del año 2012 nos hemos extendido a parte de Mesoamérica con Guatemala, El Salvador, Belice y Honduras; realmente es un evento maravilloso y nos da gusto que crezca cada vez más”, compartió.
El Guendaliza’ y sus eventos
Previo a la presentación de bailes mesoamericanos, el Guendalizaa también comprende un recorrido y paseo previo, el cual se realiza un día antes y se le denomina Calenda.
En la Calenda, todas las delegaciones que danzarán en el Guendalizaa participan. El recorrido comienza en el barrio de Santa María en la ciudad de Tehuantepec, porque según la historia fue donde comenzó el inicio de la batalla que sostuvieron los héroes zapotecas con los españoles.
Este año fueron alrededor de dos mil personas las que participaron en la Calenda, danzaron bailes típicos, disfrutaron de mezcal y mistela, como bebidas tradicionales en las fiestas patronales de los tehuantepecanos.
Asimismo, se realizaron paradas en distintas iglesias de los barrios, en donde los asistentes pudieron disfrutar de los bailes de las delegaciones que visitan esta tierra zapoteca.
Es importante resaltar que en esta edición del Guendaliza’a2015, el alcalde Donovan Rito García, a la par con esta fiesta de las culturas, inauguró la iluminación arquitectónica del palacio municipal, edificio antiguo que data de hace 200 años; asimismo, se inauguró la sala de cabildo “General Cristóbal Salinas”, en donde los regidores declararon por decisión unánime conmemorar el centenario luctuoso de Doña Juana C. Romero, mujer emblemática y benefactora de esta ciudad.
Urge mayor impulso a la cultura y el turismo de parte de gobierno estatal
Mario Mecott no quiso omitir su postura ante la necesidad urgente de que el Gobierno del Estado a través de sus Secretarías, de Turismo, y de las Culturas Oaxaqueñas impulsen este tipo de eventos.
Manifestó que la difusión que merece este tipo de evento como el Guendalizaa, que en este año agrupó a más de 10 mil personas, es para que se viera más el aporte del estado, porque es un evento cultural similar a la Guelaguetza que se hace en la capital del estado.
El Guendalizaa es un encuentro étnico cultural mesoamericano, aquí los asistentes pudieron disfrutar bailes típico, autóctonos que no se lucen en la Guelaguetza en donde también hay bailes de las ocho regiones de Oaxaca, esperamos que las autoridades estén conscientes y apoyen la difusión que se hace sobre todo a nivel nacional e internacional.
“Un evento de esta naturaleza cuesta mucho dinero, entre pago de viáticos de los artistas, iluminación, escenario, audio, en fin, por fortuna las autoridades municipales se han involucrado, algunas le entran de lleno e impulsan la cultura y el turismo, otros a mediana escala, pero aportan, porque esto que se hace también es para generar entrada de recursos, para que los artesanos y artesanas, así como comerciantes vendan”, expresó.
Mecott Francisco insistió en que es necesario que las autoridades se comprometan y valoren todo lo que las regiones de Oaxaca hacen para dar a conocer la cultura, que no genera riqueza ni entradas económicas, pero si se maneja una buena estrategia, el turismo nacional e internacional seguramente disfrutará.
“La espiritualidad indígena está aquí presente, por eso queremos que en Tehuantepec se sigan creando proyectos que sean atractivos turísticos y culturales, aquí es la tierra de la inmortal Sandunga y nosotros la amamos”, concluyó.
