Por Israel Pérez Valencia
Santiago de Querétaro, Querétaro. 23 de febrero de 2017 (Agencia Informativa Conacyt).- Desde el 2016, el Consejo de Ciencia y Tecnología del Estado de Querétaro (Concyteq) diseñó una estrategia para fomentar una cultura científica y promover la apropiación del conocimiento en las escuelas de nivel básico en los 18 municipios del estado de Querétaro, a través del programa “Divulgación de la ciencia en zonas rurales”.
Esta iniciativa, derivada de un proyecto iniciado por el Concyteq en 2012 con el apoyo del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) a través de su iniciativa de apropiación social del conocimiento científico y tecnológico, ha implementado diversas actividades para comunicar la ciencia, tales como charlas, talleres, experimentos, lectura de cuentos de ciencia y en algunos casos la música, en primarias y secundarias del estado, lo que ha generado a su vez el interés y apoyo de las autoridades educativas en la entidad.
En ese sentido, la jefa del área de Difusión del Concyteq, Alicia Arriaga Ramírez, informó que el programa “Divulgación de la ciencia en zonas rurales” ha causado un gran impacto en los niños atendidos, de quienes se puede observar entusiasmo en su participación durante las actividades presentadas por el equipo de divulgadores, en las que se puede hacer palpable el conocimiento científico.
“Los niños muestran su interés de formas tales como la participación en las actividades, expresando sus comentarios en forma de dudas o compartiendo sus conocimientos y emociones al elaborar alguna de las actividades manuales diseñadas para demostrar la aplicación del conocimiento compartido. En algunos casos modifican las formas sugeridas para obtener el mismo resultado, atribuimos esta creatividad a que los materiales que se seleccionan son de acceso fácil en sus comunidades”, destacó.
Arriaga Ramírez aseguró que otro aspecto importante es el trabajo del equipo de los seis divulgadores del Concyteq que, con su actitud, motivan el interés en los niños, quienes los invitan a seguir llevando esas actividades a sus escuelas por las carencias que existen en las escuelas rurales del estado.
“Han escuchado comentarios de los padres de familia respecto a que llegan de la escuela muy emocionados de lo que vivieron en las actividades científicas que realizaron. Esta actividad requiere de pocos recursos respecto a los materiales, pues parte de lo que buscamos es que los niños puedan reproducir sus propios prototipos con objetos y materiales que puedan conseguir fácilmente en su comunidad”, abundó.
Escuela primaria Benito Juárez, de Santa Rosa Jáuregui
La Agencia Informativa Conacyt tuvo la oportunidad de acompañar al equipo de divulgadores del programa “Divulgación de la ciencia en zonas rurales” a la escuela primaria Benito Juárez ubicada en la delegación Santa Rosa Jáuregui, una población que se encuentra a las afueras del municipio de Querétaro, en cuya escuela se tiene una matrícula de 500 estudiantes provenientes de la delegación y zonas más alejadas de este punto delegacional, como La Cruz, Las Rosas, El Pedregal y Hacienda Santa Rosa.
El divulgador científico del Concyteq, José Guadalupe Cruz Pacheco, puntualizó que en este proyecto de apropiación social de la ciencia, lo que se pretende es llevar un poco de lo que es la ciencia de una manera contextualizada para los niños y que descubran la utilidad de la ciencia en su vida cotidiana.
“Por ejemplo, hoy tenemos una práctica de microscopía. Van al patio de su escuela por unas muestras de plantas o insectos que quieran ver y nosotros les enseñamos a montar la muestra para que puedan verla en microscopios y hagan una comparación de lo que se ve a simple vista y lo que no, como los filamentos en las patas de una hormiga. En mi caso, voy a buscar un charco de agua sucia para que puedan observar organismos, como protozoarios, y los vean detenidamente en tiempo real”, explicó.
Cruz Pacheco indicó que la capacidad que tienen los niños de asombrarse ante los fenómenos científicos es un factor importante para generar en ellos el interés por el conocimiento, con el trabajo conjunto entre divulgadores y maestros.
Actividades lúdicas para el conocimiento científico
Por su parte, el divulgador del Concyteq, Marcos Rendón Reséndiz, abundó que otras de las actividades que promueve el programa van enfocadas a la adquisición de principios científicos como el equilibrio o la gravedad acompañados de actividades lúdicas.
“De las charlas y talleres que más le interesan a los niños, son los cohetes; se les explica lo que son los viajes espaciales y qué se necesita para ellos; después se hace una actividad lúdica, que consiste en que fabriquen su propio cohete. Esto los motiva a conocer más sobre principios de la física y la ingeniería espacial”, abundó.
Rendón Reséndiz sostuvo que este tipo de iniciativas motivan también el trabajo de los divulgadores, en el que su labor promueve la transición a una sociedad mexicana más interesada en la ciencia y tecnología.
“Integrando este primer nivel que es la ciencia y la tecnología como formas para entender el mundo de manera ordenada, nos motiva bastante a nosotros y a los niños. Los alumnos te abren un horizonte muy grande, entendemos junto con ellos mucho más todas estas cosas”, aseguró.
Uno de los alumnos más interesados y participativos en estas sesiones fue Yael Rodríguez Suárez, niño de 10 años que estudia el quinto grado de primaria en la escuela Benito Juárez de Santa Rosa Jáuregui, quien aseguró que gracias a estas actividades ha ido encontrando su vocación científica.
“Aquí en la escuela estudio español, matemáticas, ciencias, geografía e historia, pero lo que más me gusta es la ciencia, porque puedo experimentar y probar cosas nuevas, cuidar la Tierra y las cuestiones del espacio. A mí me interesa mucho la exploración de otros planetas”, indicó.
Por su parte, la maestra de la escuela primaria Benito Juárez, María Erika Samaniego Núñez, subrayó la importancia de estas iniciativas para la formación integral de los estudiantes de nivel básico y reforzar los conocimientos que ven en el salón de clase.
“Para los niños es muy interesante compartir, experimentar y conocer un poco más sobre ciencia y tecnología. Nosotros trabajamos la ciencia por proyectos para que puedan apreciar cómo ocurren los fenómenos realmente, en el caso de erupciones de volcanes y otros fenómenos naturales, observaciones de hongos, entre otras”, detalló.
Samaniego Núñez resaltó la importancia de fomentar el talento científico de los niños, no solo en el salón de clases o en las actividades propuestas por el Concyteq, sino también en el hogar.
“En la primaria es muy poco el tiempo que tenemos con los niños y tratamos de fomentar en ellos el gusto por el conocimiento científico; por eso le recomendamos mucho a los papás que hagan el esfuerzo por llevarlos a museos o exposiciones. Es complicado, porque la mayoría de ellos trabaja incluso los fines de semana, pero en verdad vale la pena”, aseguró.
La directora de la escuela primaria Benito Juárez, María del Carmen Rodríguez Duarte, reconoció que este programa de divulgación de la ciencia apoya y complementa la labor de los docentes en la impartición de este tipo de conocimientos y que la iniciativa de ir a las escuelas resulta positivo, por las dificultades que tienen algunas instituciones de trasladarse al Museo El Péndulo del Centro Educativo y Cultural del Estado de Querétaro (CECEQ) Manuel Gómez Morín, donde el Concyteq imparte estas actividades.
“El problema que teníamos es que ya después no tuvimos la posibilidad de estar saliendo por muchos requisitos que no podíamos cubrir. Entonces, el que vengan a la escuela me parece una excelente propuesta, porque nos acercan ese conocimiento científico al que no teníamos alcance. A los niños les encanta que venga una persona diferente a sus maestros a enseñarles cosas nuevas y que apoyen su aprendizaje”, reconoció.
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