«Los galardonados con el Nobel de Química de 2016 han miniaturizado máquinas y han llevado la química a una nueva dimensión», celebra la nota.
A partir del rotaxano, Soddart desarrolló «músculos moleculares» y «chips informáticos basados en moléculas», según la Academia.
El trabajo de Sauvage, Stoddart y Feringa, premiado con los 850.000 euros del Nobel, ha demostrado que es posible crear máquinas 1.000 veces más finas que el grosor de un cabello.
Los investigadores han desarrollado moléculas con movimientos controlables, que pueden llevar a cabo tareas cuando se les proporciona energía.
El holandés Bernard Feringa (Barger-Compascuum, 1951), de la Universidad de Groninga, fue el primero que construyó un motor molecular, prosigue la nota.
Fuente: http://elpais.com/elpais/2016/10/05/ciencia/1475660117_464770.html