Diana MANZO
Oaxaca, (pagina3.mx).- Joseline Sosa Gómez, del Partido Fuerza por México(FPM), y Azul Gómez Montealegre, por el PRI, son las únicas candidatas trans en la entidad.
Ello significa que el resto de los partidos políticos incumplen con los derechos políticos de la comunidad de la diversidad sexual.
Joseline es candidata a diputada federal por el Partido Fuerza por México por el Distrito 05, con cabecera en Santo Domingo Tehuantepec, Oaxaca.
Azul es candidata plurinominal local del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el número 11 de la lista.
Para Amaranta Gómez Regalado, activista muxe y quien fuera la primera candidata trans que postuló un partido político en México en el 2008, considera que:
El fallo del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) llegó tardío.
Por consiguiente, agregó, también las acciones afirmativas del Instituto Estatal Electoral y de Participación ciudad de Oaxaca (IEEPCO).
“Se validaron con retraso sobre los derechos a la participación en las elecciones de los indígenas, afro descendientes, personas con discapacidad, personas LGBTTIQ+, mayores de 60 años y juventudes”, afirmó.
El fallo del Tribunal ratifica los derechos de estos grupos cuando el proceso electoral ya está muy avanzado.
Lo que dificulta la aplicación de las prerrogativas que originalmente aprobó el Consejo General del IEEPCO.
Dijo que los partidos políticos de todas los colores deben aprender “a compartir un pastel” y a privilegiar los derechos políticos de toda la ciudadanía, incluyendo a la comunidad de la diversidad sexual y de los grupos minoritarios, a ser votados.
Al igual, señaló que por un lado, los partidos grandes los excluyen sabiendo que deben cumplir con los grupos minoritarios, mientras los partidos nuevos y pequeños los incluyen, pero solo para mantener el registro, no por mero derecho.
En el Istmo de Tehuantepec, donde erróneamente se le conoce como «paraíso muxe”, es ejemplo de exclusión a la comunidad de la diversidad sexual en temas políticos.
Lo que hace entender que los partidos políticos desde los de antaño hasta los nuevos están en el aprendizaje.
La esperanza es que las próximas elecciones, ahora sí, se tomen en cuenta las determinaciones del TEPJF para los grupos minoritarios.