Amnistía Internacional expresa su preocupación ante la actuación de las fuerzas de seguridad frente a las manifestaciones ciudadanas. Las recientes detenciones en el marco de estas manifestaciones se producen en un contexto de repetidas declaraciones por parte de altos funcionarios públicos, incluido el Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, que pueden inicitar a la criminalización de la legítima protesta social y al uso indebido de la fuerza para contenerla. El actuar de las autoridades genera un efecto disuasivo sobre aquellos sectores de la sociedad que desde el pasado 26 de septiembre, en ejercicio de su derecho a la libertad de reunión y asociación, han salido a las calles exigiendo la adopción de medidas eficaces para determinar el paradero de los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos y el enjuiciamiento de todas las personas responsables.
Ante esta situación, Amnistía Internacional dará seguimiento puntual a la manifestación del 1 de diciembre y exige a las autoridades poner fin a estrategias que tengan como propósito disuadir las protestas y limitar los derechos de las personas. Las autoridades deben poner en primer plano el respeto a los derechos de quienes se manifiestan en México.